La deforestación en la Amazonía brasileña cayó al menos un 60 % en julio de 2023 en comparación con el mismo mes del año pasado, según datos Sistema de Detección de Deforestación en Tiempo Real (Deter).
Las cifras exactas de julio aún se están recopilando, sin embargo, la ministra de Medio Ambiente, Marina Silva, dijo a The Guardian que revelarían una mejora significativa de "al menos un 60 %", mientras que los analistas independientes citados por el medio sugieren que podría incluso llegar al 70 % en comparación al mismo período de 2022. "Esta va camino a ser la caída más pronunciada desde 2005. Todavía estamos averiguando por qué sucede tan rápido", expresó Tasso Azevedo, ingeniero forestal y fundador del grupo analítico MapBiomas.
Según la ministra, la clave para la mejora en el país ha sido la decisión del presidente Luiz Inácio Lula da Silva de "apuntar a la deforestación cero", lo que ha llevada a la creación de "nuevas unidades de conservación y territorios indígenas". "Ahora debemos avanzar hacia un nuevo modelo de prosperidad que sea menos depredador, menos dañino para la población local y el bosque", destacó.