El representante saharaui en España, Abdulah Arabi, declaró en una rueda de prensa que la llegada del presidente del Gobierno español, Pedro Sánchez, a Marruecos es una clara muestra de "su indiscutible apoyo a un régimen decadente que vulnera de manera sistemática, diaria e impune los derechos humanos del pueblo del Sáhara Occidental".
Desde la llegada de Sánchez a su polémico destino vacacional, "la prensa marroquí ha expuesto su estancia como respaldo absoluto a la ilegítima reivindicación mantenida por Marruecos respecto al Sáhara Occidental", señaló.
Además, el Frente Polisario condenó tales acciones, argumentando que, aunque el viaje se haya caracterizado como estrictamente privado, su elección está cargada de un "enorme contenido político", especialmente después del radical giro de Sánchez respecto al pueblo saharaui, momento desde el cual ha quedado muy clara su posición "unilateral".
El Gobierno de Pedro Sánchez avaló en marzo de 2022 el plan de Marruecos que convertiría a la excolonia española en una provincia autónoma marroquí, abandonando así su posición de neutralidad activa en el marco de la ONU.
Indignación generalizada
El reciente viaje de Pedro Sánchez ha provocado gran polémica en todo el país, no solo porque se produce después de las elecciones el mes pasado, sino porque su postura frente al Sáhara Occidental ha sido rotundamente rechazada.
El Partido Popular criticó fuertemente a Sánchez. Miguel Tellado, vicesecretario del PP calificó esa visita como "una provocación en toda regla", asegurando que el presidente del Gobierno le debe "importantes explicaciones" a los ciudadanos sobre cambio de postura con respecto a Marruecos.
Por su parte, Idoia Villanueva Ruiz, responsable de la Secretaría Internacional del partido de izquierda Podemos, también reprochó las acciones del presidente, calificándolas de "complacencia" mientras Marruecos "sigue vulnerando los derechos fundamentales con total impunidad".