El presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, aseguró que él jamás cometió ningún acto de violencia política de género en contra de la precandidata presidencial de la oposición, Xóchitl Gálvez, como determinó el Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación (TEPJF).
"Me llama la atención que sostengan que yo agredí verbalmente a la señora, que hay violencia de género en lo que yo expresé, quiero que me digan qué fue lo que dije, según lo cual, se trató de un agravio", afirmó este viernes en su habitual conferencia de prensa.
La Sala Superior del Tribunal Electoral resolvió el pasado miércoles que las declaraciones del presidente en contra de Gálvez podrían constituir violencia política de género en contra de Gálvez, ya que replicaría mensajes patriarcales.
"Pretenden transmitir la idea de que sus aspiraciones políticas (de Gálvez) para ocupar un determinado cargo no se sustentan en sus méritos, sino en la decisión de un grupo de hombres", señaló el fallo.
Además, este viernes la Comisión de Quejas y Denuncias del Instituto Nacional Electoral (INE) ordenó el retiro o modificación de las conferencias matutinas del 10, 11, 14 y 17 de julio y le exigió al presidente que se abstenga, bajo cualquier modalidad o formato, de comentar, opinar o señalar temas relacionados con los derechos político-electorales de Gálvez y de las mujeres, ya sea de forma positiva o negativa.
En el marco de su conferencia matutina, López Obrador afirmó que él sólo ha dicho que Gálvez es la candidata del bloque conservador.
"¿Cuál es la violencia de género? ¿O qué no es cierto que es la candidata de Claudio?", dijo en referencia al empresario opositor Claudio X. González, a quien identificó como "el gerente del bloque conservador", un grupo que habría escogido a Gálvez como su mejor candidata para las elecciones presidenciales de 2024.
"A partir de ahí echaron a andar una campaña en favor de la señora. ¿Dónde está la violencia? Esto es política, es lo más legal que puede haber. La política es, si no un arte, una ciencia, es un oficio, pero además es lo que permite que nos organicemos como sociedad", afirmó.
¿Y la ley?
En la rueda de prensa, un reportero le advirtió que cada vez que se refiere al proceso electoral viola la ley de la misma manera que lo hizo el expresidente panista Vicente Fox en 2006, cuando hizo campaña para evitar que el propio López Obrador ganara la presidencia.
Sin embargo, López Obrador negó que esté interfiriendo directamente en las precampañas.
"No estoy llamando a votar por nadie, no estoy influyendo. Estoy hablando nada más de una realidad: que existe un bloque conservador que está en contra de la transformación del país y que es muy corrupto", dijo.
También consideró que, a pesar de que es el presidente, tiene el derecho de expresarse como cualquier ciudadano.
"Además tengo las pruebas de que son una pandilla de rufianes, de corruptos, que le han hecho mucho daño al país, entonces no estoy metiéndome en cuestiones de género, no tiene que ver con hombres o mujeres", dijo.
Sanciones recurrentes
Las autoridades electorales han sancionado en diversas ocasiones a López Obrador, ya que la ley explicita que el presidente no debe hablar sobre los partidos y los candidatos para no influir de manera indebida en las elecciones.
La semana pasada, por ejemplo, el Tribunal Electoral le ordenó que se abstenga, "bajo cualquier modalidad o formato, de realizar manifestaciones, emitir comentarios, opiniones, o señalamientos sobre temas electorales ya sea de forma positiva o negativa, cuidando que su actuar se encuentre ajustado a los principios constitucionales de imparcialidad y neutralidad".
En respuesta, el presidente consideró que los magistrados de este Tribunal y los de la Suprema Corte de Justicia lo atacan porque están al servicio de la oligarquía.
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