El Departamento de Estado de EE.UU. ha anunciado este viernes la suspensión de determinados programas de asistencia exterior en Níger, de las que hasta el golpe de Estado orquestado por la junta militar se beneficiaba el Gobierno electo de la nación.
La medida es "provisional" y no se extiende a todos los programas de ayuda que EE.UU. tiene en marcha en el país africano. Así, Washington seguirá brindando asistencia humanitaria y alimentaria que "salva vidas" y planea proseguir también con sus actividades gubernamentales "cuando sea factible hacerlo", como son las operaciones diplomáticas y de seguridad "para la protección del personal estadounidense".
"Como hemos dejado claro desde el principio de esta situación, la prestación de ayuda de EE.UU. al Gobierno de Níger depende de la gobernabilidad democrática y del respeto del orden constitucional", declaró el Departamento de Estado en el comunicado.
Al reiterar su compromiso con el apoyo al pueblo nigerino "para ayudarlo a preservar su democracia, que tanto le costó conseguir", el Gobierno estadounidense señaló que revisará sus decisiones respecto a la asistencia y cooperación "a medida que evolucione la situación sobre el terreno" y cuando se vuelva "coherente" con sus "objetivos políticos y restricciones legales".
"Reiteramos nuestro llamamiento a la restauración inmediata del Gobierno democráticamente elegido de Níger", concluye el comunicado.