Varios países africanos están planeando enviar un contingente de hasta 25.000 soldados a Níger como parte de una posible intervención militar contra los militares rebeldes que gobiernan el país desde que a finales de julio un golpe de Estado depusiera al presidente Mohamed Bazoum, informa la emisora francesa RFI.
De acuerdo con el medio, Nigeria podría aportar hasta la mitad de los efectivos del contingente, "ya que su presidente, Bola Tinubu, prometió tolerancia cero contra los golpes de Estado", indica el medio. La semana pasada Tinubu solicitó al Senado de Nigeria autorizar una intervención militar en el vecino Níger, pero el organismo lo rechazó. Por su parte, Francia aseguró que apoyará los esfuerzos para revertir la toma del poder por parte de los rebeldes en Níger y señala que no retirará a sus fuerzas del país.
Según RFI, otras de las naciones dispuestas a participar en la invasión son Senegal, Benín y Costa de Marfil. Los jefes de gabinete y sus equipos, responsables de la planificación, están en contacto regular y se han puesto a disposición de las órdenes de la Comunidad Económica de los Estados de África Occidental (CEDEAO), afirma el medio.
La noticia llega un día después de que la junta militar que gobierna Níger comunicara que, según "informaciones concordantes", una nación está preparando a sus Fuerzas Armadas para atacar Níger en "coordinación" con la CEDEAO y grupos terroristas. En este contexto el Consejo Nacional de Salvaguarda de la Patria (CNSP) de Níger advirtió a las supuestas partes involucradas que cualquier injerencia militar en los asuntos internos del país tendría "desastrosas consecuencias" para "la seguridad de la subregión, su estabilidad y la unidad de su comunidad".
"En cualquier caso, las Fuerzas Armadas de Níger y todas nuestras fuerzas de defensa y seguridad, respaldadas por el apoyo inquebrantable de nuestro pueblo, están dispuestas a defender la integridad de nuestro territorio y el honor de nuestro pueblo'', remarcó el CNSP.
- Un grupo de militares de la Guardia Presidencial nigerina bloqueó la mañana del 26 de julio la entrada al palacio presidencial, en la capital del país, Niamey, y retuvo al presidente Mohamed Bazoum y a su familia. Al día siguiente, los rebeldes anunciaron el derrocamiento del Gobierno y la imposición de un toque de queda en todo el país entre las 19:00 y 05:00 horas, además de la suspensión del funcionamiento de todas las instituciones.
- El domingo 6 de agosto, la junta militar anunció el cierre del espacio aéreo del país ante la expiración del ultimátum puesto por la CEDEAO y advirtió de una "respuesta energética e inmediata" en caso de producirse una intervención militar.
- El CNSP denunció que dos países centroafricanos empezaron a desplegar a sus Fuerzas Armadas para iniciar una intervención militar en Níger.
- El 31 de julio, Burkina Faso y Malí aseveraron que cualquier intervención militar en Níger para restablecer en sus funciones al presidente derrocado sería considerada como "una declaración de guerra" contra ambas naciones.