El número de muertos por los incendios forestales en la isla de Maui (Hawái, EE.UU.) aumentó este domingo a 93 y se trata de uno de los desastres naturales más mortíferos registrados en el país en los últimos 100 años, según la Asociación Nacional de Protección contra Fuego estadounidense.
El gobernador del estado de Hawái, Josh Green, indicó que las pérdidas materiales son de miles de millones de dólares, mientras que la cifra de víctimas mortales podría seguir aumentando.
"Este es el desastre natural más grande que hemos enfrentado", dijo Green. "También será un desastre natural del que tomará una cantidad increíble de tiempo recuperarse", agregó.
Las llamas han destruido, de momento, alrededor de 2.200 construcciones en Maui y los daños representan alrededor de 6.000 millones de dólares. El Gobierno estadounidense ha autorizado un apoyo de emergencia para la isla tras la "devastación" dejada por todas las casas y calles, convertidas en ceniza.
Para ver la magnitud de los daños se puede apreciar imágenes satelitales tomadas antes y después de los incendios, donde los paisajes que eran verdes ahora son grises, con algunas zonas cubiertas de humo y escombros.
Asimismo, tanto residentes de la isla como voluntarios se han sumado a las labores para proveer de alimento y suministros a la comunidad de Lahaina.