La Organización de las Naciones Unidas (ONU) resaltó este martes la reducción en el número de homicidios de defensores de derechos humanos en Colombia durante el primer semestre del año, pero mencionó una serie de desafíos para el Gobierno de Gustavo Petro, entre los que sobresale la "expansión territorial de grupos armados".
Durante una presentación efectuada en un hotel de Bogotá, la representante en Colombia de la Oficina del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos, Juliette de Rivero, ofreció en detalle los avances y los retrocesos en la materia.
"En el primer semestre del 2023, la Oficina ha observado que se registró una disminución del 19 % de los casos verificados de homicidios de personas defensoras de derechos humanos en comparación al semestre anterior", afirmó De Rivero al presentar el análisis.
Al comienzo de su pronunciamiento, señaló que la Oficina de la ONU "celebra el enfoque de derechos humanos de este Gobierno y su compromiso con la garantía de los derechos humanos".
Advertencias
Acompañada de varias figuras, incluido el expresidente colombiano Ernesto Samper, recomendó al Ejecutivo "atender con emergencia" la situación de inseguridad en varios lugares del país.
"Nos preocupa en particular la continua expansión territorial de grupos armados y las estrategias violentas de control social que utilizan contra la población civil y las organizaciones, a pesar del proceso de diálogo ofrecido a ellos", sostuvo.
Además, mencionó que han presenciado "un aumento de casi el 11 % en el número de masacres verificadas", para un total de 52, atribuidas presuntamente a "grupos armados no estatales y a organizaciones criminales".
En ese sentido, mostró su confianza en el Ejecutivo de Petro "para superar todos estos retos" y llamó a los grupos armados "a respetar la vida, las normas del derecho internacional humanitario y demostrar genuinamente su compromiso con la paz".
Hasta el momento, el mandatario colombiano no se ha referido a este informe.