El presidente de EE.UU., Joe Biden, ha convocado este viernes a su homólogo surcoreano, Yoon Suk-yeol, y al primer ministro japonés, Fumio Kishida, a una reunión trilateral en el retiro presidencial de Camp David, con el objetivo de consolidar una mayor unidad en la región del Pacífico.
"Nuestros países son más fuertes y el mundo será más seguro si nos mantenemos unidos. Y sé que esta es una convicción que comparten los tres", declaró Biden al comienzo del encuentro, la primera vez que un presidente estadounidense reúne a los líderes surcoreano y japonés en una cumbre trilateral, recoge AP.
"Quiero agradecerles a ambos la valentía política que los trajo aquí", agregó.
Durante el encuentro, los tres países acordaron un nuevo pacto de seguridad que los compromete a abrir consultas entre sí, en caso de crisis o de amenaza de seguridad en el Pacífico, según funcionarios de la Administración Biden.
Por su parte, Kishida calificó el encuentro de histórico y aseguró que el hecho de que los tres pudieran reunirse significa que, de hecho, "estamos haciendo historia desde hoy".
Viejos aliados de Washington
Si bien las dos naciones asiáticas son viejos aliados de Washington, sus relaciones han estado marcadas por la desconfianza debido a disputas políticas y legales derivadas de profundas heridas históricas por la ocupación de Corea por parte de Japón desde principios del siglo XX hasta 1945.
El mandatario estadounidense espera allanar la desgastada relación entre los vecinos asiáticos para impulsar la cooperación militar en la región, en medio de las crecientes tensiones con China y las preocupaciones sobre las persistentes amenazas nucleares de Corea del Norte.
"Es un evento histórico y establece las condiciones para un Indo-Pacífico más apacible y próspero, y unos Estados Unidos más fuertes y seguros", dijo el asesor de Seguridad Nacional de Biden, Jake Sullivan.
"Asia-Pacífico es un ancla para la paz y el desarrollo"
Mientras, el portavoz del Ministerio de Exteriores de China, Wang Wenbin, denunció la creación de "contradiciones", así como el aumento de las tensiones.
"La comunidad internacional tiene su juicio justo sobre quién está avivando los conflictos y exacerbando las tensiones. Asia-Pacífico es un ancla para la paz y el desarrollo y una tierra prometedora para la cooperación y el crecimiento, y nunca más debe convertirse en un campo de batalla para la competencia geopolítica", dijo Wang.