La primera ministra de Estonia, Kaja Kallas, declaró que no planea dimitir en medio del escándalo sobre el negocio de su marido en Rusia, mientras el Gobierno del país promovía una retórica antirrusa e instaba a que las empresas estonias cortaran sus lazos con Moscú.
En una entrevista con la compañía de radiodifusión pública local ERR, emitida este viernes, Kallas declaró que "no tiene planes de renunciar". "He servido y continuaré sirviendo como primera ministra para la libertad de Ucrania y para Estonia", dijo.
Además, la primera ministra afirmó que ella y su esposo, Arvo Hallik, "nunca hablan de negocios en casa".
Esta semana, se reportó que la empresa Stark Logistics, de la que es copropietario Arvo Hallik, continuó trabajando con Rusia tras el inicio del operativo militar en Ucrania.
En medio de los continuos llamados del Gobierno estonio para que las empresas del país pongan fin a su trabajo con Rusia, los reportes provocaron críticas contra Kallas y desataron peticiones para que dimita del cargo. Además, varios políticos se expresaron a favor de su renuncia o una moción de censura contra ella.
Este jueves, la primera ministra destacó que no tiene nada que ver con las actividades de trabajo de su esposo. Añadió que, según las palabras de Arvo Hallik, una de las actividades de la compañía consistía en prestar servicios de logística, pero se suspendió un mes después del inicio del operativo militar ruso en Ucrania, es decir en marzo de 2022. "Confirmó que actualmente este servicio se presta solo para una empresa estonia y este proyecto se encuentra en la fase final", señaló Kallas.