Los gasoductos Turkish Stream y Blue Stream, a través de los cuales se transporta el gas ruso a Turquía, sufren constantes intentos de ataque, declaró este lunes el presidente de Rusia, Vladímir Putin, en una conferencia de prensa con su homólogo turco, Recep Tayyip Erdogan, tras su reunión celebrada en la ciudad rusa de Sochi.
"Se está intentando atacar Turkish Stream y Blue Stream [...] Nuestros barcos protegen estos 'streams', estos sistemas de gasoductos, y son atacados constantemente. Incluso con la ayuda de drones que se envían para lanzar estos ataques desde los puertos ucranianos del mar Negro", afirmó.
Así se refirió al hecho de que el régimen de Kiev lleva a cabo ataques contra instalaciones rusas utilizando el corredor marítimo establecido en el marco del acuerdo de granos suspendido. Subrayó que mientras Moscú "proporcionaba claramente garantías de seguridad para la navegación en el marco de este acuerdo, la otra parte [Ucrania] utilizaba los corredores humanitarios para ataques terroristas contra instalaciones civiles y militares rusas".
Al mismo tiempo, según el líder ruso, Rusia siempre ha sido y seguirá siendo un proveedor de gas "fiable y responsable". Señaló que en 2022 se suministraron 21.500 millones de metros cúbicos de gas a través de los Turkish Stream y Blue Stream, mientras que más de 10.000 millones de metros cúbicos fueron suministrados entre enero y agosto de este año.
"Rusia siempre ha sido y seguirá siendo un proveedor de gas fiable y responsable. Tenemos la intención de seguir proporcionando a la economía turca este combustible barato pero altamente eficiente y ecológico. Además, estamos dispuestos a exportarlo en tránsito a través de Turquía a consumidores de terceros países", dijo.