La presidenta de Perú, Dina Boluarte, juramentó el miércoles a las personas que se encargarán de seis carteras del gabinete ministerial. Un hecho rutinario en el país que, sin embargo, generó reticencias.
Boluarte incorporó a Eduardo Arana en el Ministerio de Justicia y Derechos Humanos; a Miriam Ponce en Educación; a Jennifer Lizetti Contreras en Desarrollo Agrario y Riego; y a Ana María Choquehuanca en Producción.
Igualmente, hubo dos enroques: Daniel Maurate, quien se desempeñaba como titular de Justicia y Derechos Humanos, ahora llevará el área de Trabajo y Promoción del Empleo; mientras que Raúl Pérez pasó de Producción a Transportes y Comunicaciones.
Perfiles polémicos
Medios locales han revelado que Arana, miembro masón del Supremo Consejo Grado 33, declaró en su momento ante el Jurado Nacional de Elecciones (JNE) una sentencia por alimentos y una denuncia por presunta violencia familiar contra su esposa.
Además, asesoró dos tesis que calificaron de "sesgado" el informe de la Comisión de la Verdad y Reconciliación, que cumplió 20 años recientemente y trató sobre los crímenes y violaciones de derechos humanos ocurridos en Perú entre mayo de 1980 y noviembre del 2000.
"Los antecedentes de este señor Arana no dicen nada bueno", declaró a la emisora local Exitosa el miembro del comité de la ONG Proética, Walter Albán, quien indicó que por sus "vínculos con el Congreso" será un promotor de sus intereses.
Otro nombre que sobresale es el de Ponce por haber sido parte del equipo técnico del partido Fuerza Popular (FP) en las pasadas elecciones presidenciales. De hecho, en 2021 participó en los debates técnicos para difundir las propuestas educativas de Keiko Fujimori.
Este año Ponce ya estuvo en el Ministerio de Educación como viceministra de Gestión Pedagógica, en un periplo en el que la cartera era dirigida por Óscar Becerra, el polémico funcionario que fue retirado por Boluarte ante sus repetidas controversias.
Pese al pasado profesional de Ponce, el primer vicepresidente del Parlamento e integrante de FP, Hernando Guerra García, descartó que haya una "alianza" entre el Ejecutivo y su bancada. "Es una excelente profesional, nos hizo buenos aportes y eso no es ningún compromiso", dijo.
Uno de los ministros que continúa, pero en otra área, es Maurate, quien en abril pasado reconoció que el hermano de la mandataria, Nicanor Boluarte, trabajó bajo sus órdenes.
"Él ha sido mi viceministro de Promoción del Empleo, y ha sido funcionario conmigo en el Ministerio de Trabajo", aclaró Maurate durante un evento.
Las críticas
El congresista Carlos Anderson aseguró que no hay mayores diferencias en este anuncio, entre otras cosas porque el titular del Consejo de Ministros, Alberto Otárola, sigue en el cargo como "casi presidente de la República".
Una opinión con la que coincidió el legislador Américo Gonza, entrevistados ambos en el canal Panamericana. "Esperábamos gente nueva y sobre todo el cambio del timón del gabinete, porque Otárola parece que gobierna en la sombra", aseveró.
En su cuenta oficial de X, por su parte, la parlamentaria Norma Yarrow señaló que "los cambios en el gabinete eran necesarios", pero consideró que Boluarte "se olvidó de dos ministros: del Interior y Defensa", en referencia a Vicente Romero y Jorge Chávez Cresta, respectivamente.
Este jueves el exministro de Trabajo, Rudecindo Vega, se sumó a las críticas e indicó que "el Gobierno nos está tratando de vender un cambio que no existe".
"Se han cambiado piezas de costadito, nada importantes en el gabinete y Otárola termina mucho más fortalecido", afirmó al programa Grado 5. "El Gobierno se sostiene y se reafirma en su prepotencia, autoritarismo y en su incapacidad", añadió.
La defensa gubernamental
Otárola acudió la tarde del miércoles al Congreso, para sustentar el presupuesto general del 2024, y atendió brevemente a la prensa para referirse a estas designaciones.
"Han prestado juramento nuevos ministros en un relanzamiento de las políticas públicas del Gobierno de la presidenta Boluarte. Se va a priorizar la ejecución del gasto público, especialmente en los sectores vulnerables", señaló.
El jefe del gabinete agregó que uno de sus principales objetivos será el "cierre de brechas" y la preparación de cara a los efectos del fenómeno El Niño.
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