Dinamarca ha tenido que pedir tanques a los museos para entrenar a los militares ucranianos. Tres museos daneses proporcionaron al Ejército seis tanques para que el "entrenamiento pudiera comenzar inmediatamente", informa la revista Forbes.
Un consorcio formado por Dinamarca, Alemania, Países Bajos y Bélgica se ha comprometido a entregar a Ucrania 178 tanques Leopard 1A5 de la década de 1980. Estos vehículos requieren para cada unidad una tripulación de cuatro personas, lo que obliga a entrenar a un número muy elevado de soldados para manejarlos. El problema es que, como hoy en día este modelo ya no es utilizado por la mayoría de los países, hay que poner en condiciones de funcionamiento vehículos que llevan mucho tiempo almacenados en depósitos, un proceso muy largo que a su vez retrasa el proceso de formación de soldados en un momento en que se les necesita lo antes posible.
El único miembro de la OTAN que sigue utilizando el Leopard 1 es Grecia, según el medio. Al mismo tiempo, en la propia Dinamarca, el último carro de combate fue retirado del servicio en 2005, es decir, hace casi 19 años, y fue sustituido por el Leopard 2. En la actualidad, el país tiene un centenar de vehículos almacenados, y es probable que su estado sea mucho menos satisfactorio que el de las piezas de museo prestadas, señala Forbes.
La única unidad blindada del Ejército danés cuenta aún con algunos tanquistas con experiencia en el manejo de Leopard 1. Junto con algunos militares retirados que han decidido volver al servicio e instructores alemanes con experiencia en vehículos de ingeniería similares del Ejército alemán, han formado un grupo de entrenamiento. El programa de formación acelerada durará seis semanas, ya que muchos de los militares ucranianos ya han conducido tanques en el campo de batalla. "No tiene sentido que les expliquemos lo que ya saben", cita la publicación a uno de los instructores daneses.