El presidente de Rusia, Vladímir Putin, ha declarado este martes que actualmente se está gestando un nuevo modelo de cooperación a nivel global que no se basa en los patrones occidentales, sino que va destinado a toda la humanidad en su conjunto.
Durante su discurso durante la sesión plenaria del Foro Económico Oriental, que se celebra en la ciudad rusa de Vladivostok (Lejano Oriente), Putin subrayó que estos cambios se producen debido a "la destrucción del sistema financiero" por parte de Occidente. Según el mandatario ruso, esto hace que cada vez más países muestren su disposición a cooperar bajo el nuevo modelo.
Prioridad estratégica para el siglo XXI
Sobre la práctica, esto se traduce en que el intercambio comercial entre Rusia y los países de la región de Asia-Pacífico creció un 13,7 % el año pasado, mientras que durante los primeros seis meses de este año se incrementó otro 18,3 %. En este contexto, Putin vinculó el desarrollo de los lazos económicos con la necesidad de desarrollar de forma acelerada el Lejano Oriente ruso, objetivo que calificó de "prioridad estratégica para todo el siglo XXI".
"El Distrito Federal del Lejano Oriente representa el 40 % del territorio de Rusia. Casi la mitad de nuestros bosques y reservas de oro, más del 70 % de nuestra pesca, diamantes, más del 30 % del titanio, del cobre, etc., se encuentra aquí. Aquí operan las empresas, los puertos marítimos y los ferrocarriles más importantes y estratégicos. En resumen, el papel del Lejano Oriente para nuestro país, para su futuro y para la posición de Rusia en un mundo multipolar es extremadamente importante", subrayó Putin.
La apuesta del Gobierno ruso por el Lejano Oriente también se refleja en la dinámica de inversiones, que triplica los índices promedios registrados en todo el país. Sin embargo, el potencial de la región aún está por explotar, lo que demuestra el hecho de que, por ejemplo, solo el 35 % del subsuelo en el Lejano Oriente esté siendo explorado, lo que abre posibilidades de crecimiento múltiple a las industrias extractivas, señaló Putin.
En este contexto, Putin instó a los empresarios a invertir sus capitales en Rusia, pese a "la presión por parte de algunos socios". "Hoy quiero reiterarlo una vez más: es más fiable y mejor, por supuesto, invertir capital en Rusia. Tanto en grandes y ambiciosos proyectos de infraestructuras, como en proyectos locales no menos importantes de desarrollo turístico urbano. Y podemos ver lo que está ocurriendo con el capital, cómo viaja y adónde va. ¡No pisen dos veces el mismo rastrillo!", recomendó.
Interconexión entre el Lejano Oriente y la Ruta Marítima del Norte
Asimismo, el presidente ruso destacó la correlación entre el desarrollo del Lejano Oriente y el de la Ruta Marítima del Norte (SMP, por sus siglas en ruso), vía por la que -destacó- transitaron 34 millones de toneladas de cargas el año pasado.
A continuación, resumimos las propuestas formuladas por Putin en su discurso para acelerar el desarrollo del Lejano Oriente y la Ruta Marítima del Norte:
- Aumentar hasta 64 millones de toneladas la producción de gas natural licuado en la zona del Ártico ruso.
- Vincular el gasoducto Fuerza de Siberia con el gasoducto Sajalín-Jabárovsk-Vladivostok para integrar así las redes de transporte de gas del oeste y del este del país y cumplir con "la tarea histórica y global".
- Formar un "corredor unido de transporte" desde San Petersburgo hasta Vladivostok con la construcción de carreteras de alta velocidad.
- Elaborar un plan de desarrollo de la aviación civil para incrementar el flujo de pasajeros hasta los 4 millones para 2030.
- Renovar ampliamente el sector energético del Lejano Oriente que aún afronta escasez de capacidades; apostar por las inversiones en energías hidronucleares y renovables con el medioambiente.
- Seguir ampliando a flota de rompehielos.