El expresidente de Colombia Álvaro Uribe (2002-2010) recorrió el domingo el corregimiento San Antonio de Prado, en el sur de la ciudad de Medellín, en el departamento de Antioquia, acompañando a candidatos a concejo de la ciudad y juntas de acción local y comunal.
Durante el recorrido, en el parque principal del corregimiento, el expresidente se encontró con un grupo de jóvenes que portaba una pancarta en la que se podía leer: "¿Quién dio la orden? 6.402+?".
Esta pregunta ha sido hecha por diferentes grupos para protestar por los 'falsos positivos', el eufemismo que se usa para hacer referencia a personas asesinadas extrajudicialmente por agentes del Estado y presentadas falsamente como bajas en combate, algo que es investigado por la Jurisdicción Especial para la Paz (JEP) de Colombia. Ese órgano de justicia transicional cifró en 6.402 los casos entre 2002 y 2008, durante la administración de Uribe.
El exmandatario se acercó a los manifestantes y les preguntó si tenían pruebas que lo vincularan con violaciones de derechos humanos o con los casos de falsos positivos'. Pero, además, en medio de la euforia confesó: "Yo di la orden de entrar a la Comuna 13, de sacar la guerrilla y los paramilitares de allá".
De esa manera, Uribe admitió su responsabilidad en la Operación Orión, realizada por militares en la Comuna 13 de Medellín entre el 16 y el 18 de octubre de 2002 —aunque habría continuado de manera silenciosa hasta diciembre de ese año—, que dejó a 80 civiles heridos, 17 homicidios cometidos por la fuerza pública, 71 personas asesinadas por paramilitares, otras 12 torturadas, 370 detenciones arbitrarias, 6 desapariciones forzadas registradas durante el operativo y más de 100 en los días y meses posteriores, según datos de la Corporación Jurídica Libertad (CJL).
Posteriormente, en su cuenta en X, el exmandatario aseguró que su gobierno "desmontó el paramilitarismo" y sacó de las Fuerzas Armadas a 27 altos militares porque podrían haber incurrido en "descuidos" que facilitaban los 'falsos positivos', pero no aclaró su confesión sobre la orden de la operación militar en la Comuna 13.
El operativo
Considerada la mayor intervención militar urbana en Colombia, las heridas que dejó la Operación Orión, que habría contado con la ayuda de paramilitares, siguen abiertas en el país suramericano.
De acuerdo con el Centro Nacional de Memoria Histórica, el operativo contó con "más de 1.500 efectivos de la fuerza pública y organismos judiciales, junto a informantes encapuchados" y se realizó para combatir a presuntos colaboradores de las guerrillas.