El presidente de Rusia, Vladímir Putin, y su homólogo bielorruso, Alexánder Lukashenko, se han reunido este viernes en la ciudad rusa de Sochi.
Putin señaló que Rusia nunca se ha negado a negociar con Ucrania y que "si la otra parte lo quiere, que lo diga explícitamente". Según el mandatario ruso, "EE.UU. está tratando de resolver todo por la fuerza o por las sanciones económicas". "No creamos una amenaza para nadie, las mayores amenazas del mundo [...] las crean las élites gobernantes de hoy en día", sostuvo.
Además, el presidente indicó que "es importante que Ucrania no olvide el 'hopak'", refiriéndose a un baile popular ucraniano. "De lo contrario, estarán todo el tiempo bailando al son y con la música de otros", lamentó.
Entre otras cosas, Putin denunció que las municiones de racimo son ampliamente utilizadas por los ucranianos en el campo de batalla. También indicó que es EE.UU. quien emplea este tipo de municiones "a manos" del Ejército ucraniano. "Hay un país que se cree excepcional, es EE.UU.", declaró, agregando que "incluso lo que se considera un crimen, [a Washington] se lo permite, porque al fin y al cabo, EE.UU. utiliza municiones de racimo".
Por su parte, Lukashenko expresó que los países occidentales, en lugar de reprender a Rusia por querer "invitar" a alguien a participar en la operación militar especial, deberían contar cuántos mercenarios enviaron a Ucrania. "Occidente debería contar primero cuántos mercenarios envió ya allá, cuántos están luchando allí. Allí [...] están todos luchando del lado de los ucranianos. ¿Por qué reprochar a Rusia por invitar a alguien?", aseveró.
Mientras, según Putin, cerca de 300.000 ciudadanos rusos firmaron contratos con las Fuerzas Armadas rusas este año. "300.000 contratos han sido firmados por personas que [...] están dispuestas a sacrificar sus vidas en interés de su patria, defendiendo los intereses de Rusia", afirmó.
Asimismo, Putin destacó que Rusia recuperó todas las competencias en el sector energético y tiene previsto poner en marcha en un futuro próximo plantas de escala mundial. "Me gustaría decir algo sobre las restricciones: las empresas europeas se negaron a suministrar equipos, al parecer pensaban que carecíamos de competencias. Restablecimos todas las competencias, desplazamos el calendario unos meses hacia la derecha, y en un futuro muy próximo se pondrán en marcha enormes empresas de escala mundial", subrayó.
La escritora Sara Rosenberg opina que "las supuestas fuerzas democráticas de Occidente" siempre han apoyado a grupos terroristas.