Un juez de la Primera Región Judicial de Tamaulipas, en México, ha condenado a 12 policías por los delitos de homicidio calificado, abuso de autoridad en informes y delitos en el desempeño de funciones administrativas por la masacre de Camargo, en la que fueron asesinadas 17 centroamericanos y dos mexicanos en enero de 2021.
La sentencia llega casi tres años después y tras tres meses y medio de juicio. Ahora, las familias esperan al próximo martes, cuando tendrá lugar la audiencia en la que se decidirá la condena impuesta a cada uno de los agentes que participaron en los asesinatos.
La masacre conmocionó a la opinión pública cuando el 22 de enero de 2021 se encontraron los 19 cuerpos calcinados en un vehículo en una carretera en Santa Anita, en el municipio tamaulipeco de Camargo, a poco menos de 70 kilómetros de la frontera estadounidense.
Después se conoció que se trataba de 17 migrantes —16 guatemaltecos y uno de El Salvador— y dos ciudadanos mexicanos. A las víctimas les dispararon hasta matarlos y luego quemaron sus cuerpos en el vehículo en el que circulaban.
Antes del ataque una de las víctimas consiguió llamar a sus familiares y les contó que estaban siendo perseguidos y disparados por policías. Otras pruebas consideradas por el juez fueron la declaración de cuatro testigos, 8 casquillos de bala encontrados en la zona, la geolocalización de uno de los vehículos policiales y de los celulares de cada uno de los imputados y el hecho de que las armas de esos agentes habían sido disparadas el día de la masacre.
"La masacre de Camargo demuestra que en México agentes del Estado torturan y asesinan a personas migrantes", afirma un comunicado de la Fundación para la Justicia, organización civil que acompaña a los familiares de las víctimas de este caso. El texto agrega: "Esa sentencia deja el mensaje de que nadie puede violar los derechos humanos de las personas migrantes, no se les puede desaparecer, torturar, y mucho menos asesinar, porque habrá una consecuencia".