Mientras las autoridades estadounidenses investigan el "percance" que obligó al piloto a eyectarse del caza F-35 Lightning II en Carolina del Sur el pasado domingo, expertos revelaron la razón por la cual la aeronave estrellada no pudo ser hallada hasta el día siguiente.
Richard Aboulafia, consultor y experto en aviación militar, afirmó este miércoles a New York Post que el piloto probablemente estuvo operando el caza de 100 millones de dólares sin ninguna capacidad de seguimiento activada y que fue expulsado antes de que pudiera hacerlo.
"Si encendiera el dispositivo a bordo, sería fácilmente rastreable", explicó. "Pero este es un avión furtivo. Si no se enciende ese dispositivo en particular, va a ser difícil establecer contacto. Lo más probable es que no haya tenido mucho tiempo para reaccionar", agregó.
El aviador, que no ha sido identificado, sufrió una emergencia de carácter desconocido durante un vuelo de entrenamiento y se vio obligado a eyectarse a unos 300 metros de altura, a 1,5 kilómetros al norte del aeropuerto internacional de Charleston, en una zona boscosa.
La aeronave tenía un equipo especial que dificultó su localización, motivo por el cual las autoridades tuvieron que solicitar ayuda a la población para encontrarlo. Aboulafia calificó la iniciativa de "inusual". "Pero ¿cuál es el perjuicio? El dispositivo a bordo no se ha encendido y no se está rastreando. Así que tiene mucho sentido que pidan ayuda a gente de la zona que podría haber visto un avión dirigiéndose en su dirección", sostuvo.
Si bien el motivo de la eyección del tripulante aún se desconoce, podría deberse a las malas condiciones climatológicas. "No sabe dónde cayó su avión, dice que simplemente lo perdió por el mal tiempo", se oye decir a alguien sobre el piloto en la grabación de una llamada a los Servicios Médicos de Emergencia del condado de Charleston difundido en las redes sociales.