El senador republicano Lindsey Graham ha vuelto a defender la necesidad de que EE.UU. siga prestando ayuda militar a Kiev, argumentando que el conflicto en Ucrania es una "buena inversión para el pueblo estadounidense".
"En 18 meses [los ucranianos] han recuperado la mitad del territorio y no ha muerto ni un solo estadounidense. La OTAN se está fortaleciendo. La economía rusa se desmorona. El Ejército ruso está siendo destruido", dijo el legislador el pasado viernes en declaraciones a Voz de América. Graham es uno de los defensores más acérrimos del Gobierno del presidente ucraniano, Vladímir Zelenski, desde el inicio de los combates.
El senador reiteró que EE.UU. no perdió "ni un solo soldado" y dijo que Ucrania es "el socio" con el que soñó. "Están listos para luchar. Solo necesitan nuestro apoyo económico y militar. No quieren nuestros soldados", aseveró.
Asimismo, arremetió contra algunos críticos del Partido Republicano que se oponen a la idea de seguir armando a Ucrania, argumentando que esto no sirve para los intereses de la seguridad nacional de Washington. "Si le derrotamos [al presidente ruso, Vladímir Putin] en Ucrania, haremos del mundo un lugar mejor, y lo único que necesitan es el apoyo militar y económico estadounidense, que forma parte de nuestro presupuesto de defensa", insistió.
La semana pasada, durante una reunión con los legisladores estadounidenses en el marco de su visita a EE.UU., Zelenski advirtió a los congresistas que Kiev podría perder si se corta la asistencia militar.
Entretanto, el diario The New York Times, citando a funcionarios estadounidenses, reportó que las fuerzas de Kiev no alcanzarían sus objetivos estratégicos en el marco de su contraofensiva que permanece atascada.