En un sorpresivo gesto, el presidente en funciones del Gobierno de España, Pedro Sánchez, no dio la réplica al líder del Partido Popular (PP) y candidato a la presidencia del Ejecutivo, Alberto Núñez Feijóo, tras su discurso ante el Congreso de los Diputados.
Después de una intervención inicial, que ha durado algo más de hora y media, en la que el candidato conservador arremetió contra la administración de Sánchez y desgranó parte del programa del Gobierno que pretende formar, la sorpresa ha saltado al Hemiciclo.
Sánchez delegó el turno de palabra que correspondía a los socialistas, segunda fuerza en la Cámara Baja tras las elecciones celebradas el 23 de julio, en el diputado Óscar Puente.
El diputado socialista recordó que el Partido Popular ha pactado con la ultraderecha Vox, en los territorios en los que ha tenido oportunidad, para desbancar a alcaldes y presidentes regionales socialistas, que habían sido los más votados. "La única ley que defienden ustedes es la ley del embudo", espetó.
"No pierdan el tiempo buscando traidores, pierdan la esperanza de quebrar a este Partido Socialista", le expresó a la bancada del PP, en respuesta a las declaraciones de las últimas semanas de varios voceros conservadores, que apelaban a que algunos diputados socialistas no acataran la disciplina de partido y permitieran la investidura de Feijóo.