El primer ministro de Canadá, Justin Trudeau, ha declarado este miércoles que altos funcionarios están revisando el informe de la Comisión Deschenes —una investigación independiente de la década de 1980 que examinó a presuntos criminales de guerra nazis en el país— con miras a hacerlo público, informa CBC. El mandatario anunció que el Gobierno "está revisando detenidamente" la desclasificación de registros de nazis que emigraron a Canadá después de la Segunda Guerra Mundial.
La medida se toma después de que varios grupos de derechos humanos judíos en el país señalaran que Ottawa debería revelar más información sobre los criminales nazis que residen en la nación, dado el reciente escándalo sobre el homenaje a un veterano nazi ucraniano en el Parlamento.
Entre 1985 y 1987, la Comisión Jules Deschenes investigó a personas sospechosas de haber cometido crímenes de guerra durante la Segunda Guerra Mundial y que se refugiaron en Canadá. Gran parte del informe, incluidas las listas de criminales nazis, no se hizo público.
Como resultado del trabajo de la comisión, el Parlamento canadiense aprobó las enmiendas al Código Penal que permitieron a los tribunales nacionales juzgar los crímenes de guerra cometidos fuera del país. Las personas que sean declaradas culpables en el marco de estos casos pueden ser deportadas de Canadá y despojados de su ciudadanía. Hasta el momento, ningún nazi refugiado en este país norteamericano ha sido condenado bajo estas normas.
Anteriormente, Trudeau se disculpó por la ovación brindada en septiembre a un veterano ucraniano de la 14.ª división de Granaderos Waffen-SS durante una sesión de la Cámara de los Comunes del Parlamento en presencia del presidente ucraniano, Vladímir Zelenski, asegurando que desconocían el contexto. En respuesta, el canciller ruso, Serguéi Lavrov, calificó de vergonzosas las excusas de Trudeau, afirmando que "todo el mundo" sabía sobre el pasado del homenajeado.