El presidente finlandés, Sauli Niinisto, ha declarado este martes que el gasoducto submarino Balticconnector, entre Finlandia y Estonia, que el domingo fue puesto fuera de servicio por una caída de presión, podría haber sido dañado como resultado de una "actividad externa".
"La causa de los daños aún no está clara, la investigación sigue en curso con la cooperación de Finlandia y Estonia", afirmó.
El mandatario aseguró que está "en contacto permanente" con sus aliados y que esta jornada mantuvo una conversación telefónica con el secretario general de la OTAN, Jens Stoltenberg. "La OTAN está dispuesta a colaborar en las investigaciones", señaló Niinisto.
Por su parte, el jefe de la Alianza Atlántica escribió en su cuenta de X que "la OTAN comparte información y está dispuesta a apoyar a los aliados afectados".
La Policía comunicó que los daños se investigan por el momento como "vandalismo", recogen medios locales. Según el Servicio de Guardia de Fronteras finlandés, el punto dañado del gasoducto se encuentra en la parte central del golfo de Finlandia, dentro de la zona económica del país escandinavo.
Mientras, Bloomberg reportó con referencia a personas familiarizadas con el asunto que la investigación sobre los daños se basa en la hipótesis de que se trató de un acto deliberado de destrucción, pero todavía no hay conclusiones definitivas.
- El pasado domingo, se observó una caída de presión en el gasoducto Balticconnector. A partir de las observaciones realizadas, se sospechó que hay una fuga, por lo que las válvulas de la tubería se cerraron.