Papelitos escritos a mano y repartidos en el metro. Fotocopias pegadas en ascensores. Cartelería colocada en las calles. Asambleas autoconvocadas en las plazas. Canciones populares adaptadas para promover el voto en favor de un candidato.
Todo vale en estos días previos a las elecciones presidenciales del domingo en Argentina para poner en marcha las "micromilitancias", originales ejercicios en los que la ciudadanía se aleja de las prácticas corporativas partidarias y trata de sumar votos por su propia cuenta. O, en este caso, de restar.
Porque muchas de las acciones que se ven en las calles y en las redes sociales se centran en alertar sobre los riesgos que representa Javier Milei, el candidato de la ultraderecha que quiere privatizar los servicios públicos, la salud y la educación; que tratará de echar abajo la legalización del aborto y parar las obras públicas; y que propone transformar la donación de órganos y la adopción en "mercados", en los que lo mismo se podrá comprar un riñón que un niño.
En algunos casos el mensaje es claro: "vota por quien quieras, menos por Milei". En otros, sí se pide el voto concreto en favor de la candidata de la alianza conservadora Juntos por el Cambio, Patricia Bullrich, pero sobre todo, del abanderado del oficialismo, el ministro de Economía Sergio Massa. Juan Schiaretti (Hacemos por Nuestro País) y Myriam Bregman (Frente de Izquierda) están relegados de la contienda.
"Hago una micromilitancia en TikTok que me causa gracia, pero entro a videos y comento onda 'mmm me convenció Massa, al menos parece un hombre serio' o 'estaba entre Massa y Milei, pero Milei me parece que está cada vez más loco' y no sabes cómo prenden (convencen)", contó un usuario de X.
"Mi mamá hace pocos días fue a un recital a hablar de a uno con los jóvenes. Y habla con cada taxista; de verdad, con pedagogía, escuchando sus argumentos, rebatiendo con amorosidad y cabeza. Imprimió una lista de motivos por los cuáles no votar a quien ya sabemos (Milei) y la reparte", señaló otra.
Iniciativas
"En mi trabajo también pegaron en la puerta el otro día un flyer casero superponiendo propuestas Milei vs. Massa, obviamente dejando en evidencia las locuras de Milei y pidiendo que no entreguemos el país. Me pareció hermoso", escribió un oficinista.
"Los dueños de la empresa hicieron una charla hablando básicamente de que la constructora construye obra pública y que nunca a los privados les interesó hacer calles y hospitales donde no son rentables. Por eso, es importante entender el sentido social de la obra", narró un trabajador al evidenciar la preocupación que hay en todos los sectores.
Un "vecino preocupado sin afiliación política" optó por hacer en su computadora una tabla comparativa de las propuestas de Milei, Massa y Bullrich en materia de educación, salud, crisis climática, trabajo privado y estatal, Malvinas, recursos naturales, libre uso de armas y deuda. Luego las fotocopió y las repartió entre sus vecinos.
Una joven emprendedora que vende bordados plasmó en uno de sus trabajos el mensaje: "Milei te odia" y agregó: "Milei odia a las mujeres, odia la educación y la salud pública. Odia las minorías. Odia la democracia. Odia las expresiones y los ídolos populares. Odia a las Malvinas argentinas y a Maradona. Milei odia a la Argentina. Milei te odia a vos".
También explicó los motivos de su micromilitancia. "Tengo mucho miedo de lo que pueda llegar a pasar si llega al poder (…) hay mucho enojo y falta de información y creo que contando lo que sentimos podemos generar un diálogo", confió.
Un vecino decidió escribir y recortar papelitos a mano con el mensaje: "En defensa de la salud y educación pública, votá Massa presidente". Los reparte entre sus vecinos.
Acciones
En tono irónico, los alumnos del Colegio Nacional de Buenos Aires colocaron en la entrada un inmenso cartel con el aviso: "Se vende: edificio en block: Últimos días gratis. Desalojo inmediato. Milei propiedades".
Un colectivo creó la página web "Da vuelta al voto de Milei", en la que ofrece una guía para convencer a otros ciudadanos de que no voten al candidato de La Libertad Avanza.
"Si estás acá, estás de acuerdo en que Milei es un mal que hay que combatir y querés hacer algo al respecto. Pensamos igual (...) Sabemos que el 'mileísmo' está muy movilizado y tiene una maquinaria aceitada y eficiente. Pero también sabemos que no podemos ser menos. La guía funciona y creemos que es vital compartirla con el campo democrático para que tengamos más argumentos y más poder para derrotar a Milei en estas elecciones", señala.
En la provincia de Buenos Aires, un señor pidió boletas de Massa para hacer barriletes (conocidos como cometa o papalote en otros países) y los está repartiendo como propaganda en el barrio.
Las paredes también sirven como escaparate. En diferentes barrios se pueden ver fotocopias pegadas con mensajes como: "si gana Milei, me quedo sin remedios" o "Las chicas superpoderosas no votan a la derecha".
Un grupo bautizado como "Vecinos autoconvocados por la patria" reparten cartas casa por casa para advertir sobre las similitudes de los programas de Gobierno de Bullrich y Milei, en tanto que colectivos de artistas se están reuniendo cada fin de semana en espacios públicos.
Jingles
Una de las micromilitancias que más llamó la atención fue la cartelería que hace unas semanas apareció en la capital, y que ironizaba sobre la venta de órganos que propone Milei.
"¡Hot sale! Ojo, miopía free. Más colores disponibles", "Pulmones, nunca fumados, hasta 30 años", "Corazón, ex runner, compatibilidad asegurada. ¡Tu papá ya tiene suficientes herramientas! Regalale algo que le sirva", señalaban los mensajes.
Pero si una iniciativa ha tenido éxito de difusión es "La fábrica de jingles", la propuesta que lanzó el canal de streaming Gelatina y que se volvió un éxito por convocar al público en general a cambiar, con sentido del humor, canciones famosas para convertirlas en propaganda de su candidato favorito.
Así, cada semana se emitieron entre risas canciones a favor de todos los candidatos, quienes, en algunos casos, incluso se apropiaron de las adaptaciones, halagados por la creatividad para modificar hits de artistas nacionales e internacionales.