El rublo y el yuan representan el 95% del comercio de Moscú con Pekín, y la proporción de liquidaciones en rublos y yuanes en el comercio exterior de Rusia ha crecido hasta casi el 70% en medio del rápido alejamiento de Moscú de las divisas occidentales, dijo este viernes el ministro de Desarrollo Económico, Maxim Reshétnikov.
Según el ministro, el volumen de comercio ruso-chino está aumentando rápidamente y este año podría alcanzar teóricamente los 215.000-220.000 millones de dólares, habiéndose alcanzado antes de lo previsto el objetivo inicial de 200.000 millones.
"Nuestro comercio realmente se está reconstruyendo. Si miramos las cifras comerciales del país [Rusia] en su conjunto, tenemos un 68% que es en rublos y yuanes. Nuestro comercio con China es ya del 95% en rublos y yuanes", declaró el ministro.
Además, señaló que las negociaciones con los socios chinos "siempre se desarrollan en una atmósfera de amistad, entendimiento y diálogo constructivo", y que la cooperación en materia de inversiones abarca diversos ámbitos, como la minería, el petróleo y el gas, el complejo agroindustrial, la ingeniería y la logística, entre otros.
A principios de septiembre, Gueorgui Zinóviev, director del Primer Departamento de Asia del Ministerio de Asuntos Exteriores ruso, declaró que la desdolarización de las relaciones económicas entre Rusia y China 'de facto' ya se había producido y "la parte de las monedas nacionales en los pagos ruso-chinos está creciendo a un ritmo extremadamente rápido", ya que a principios de 2022 era solo del 25%.