El presidente del Gobierno en funciones de España, Pedro Sánchez, fustigó este lunes las protestas contra la futura ley de amnistía registradas en varias sedes del Partido Socialista Obrero Español (PSOE).
"Atacar las sedes del PSOE es atacar a la democracia y a todos los que creen en ella", escribió Sánchez en su cuenta oficial en X, en el que expresó su "apoyo a la militancia socialista que está sufriendo el acoso de los reaccionarios a las casas del pueblo".
"Pero más de 140 años de historia nos recuerdan que nunca nadie será capaz de amedrentar al PSOE. Seguiremos adelante", añadió Sánchez en la red social.
Casi 4.000 personas, según datos oficiales, se concentraron a las puertas de la sede nacional del PSOE en la calle Ferraz, en Madrid, donde hubo disturbios que arrojaron tres detenidos por desobediencia y atentado contra la autoridad, reportó la agencia Europa Press.
Los manifestantes se concentraron en Madrid, donde ya lo habían hecho los pasados viernes y sábado, así como en Sevilla, Barcelona y Jaén. "Socialistas terroristas" y "Sánchez, traidor, España es tu nación", se escucharon entre los gritos.
A la manifestación en Ferraz acudieron también dirigentes del partido ultraderechista Vox, como su presidente, Santiago Abascal; y el vicepresidente de la Junta de Castilla y León, Juan García-Gallardo.
En Ferraz se registraron choques entre la Policía y manifestantes. Según videos difundidos en la Red, los uniformados lanzaron gas lacrimógeno para dispersar a los que protestaban.
En su mensaje, Abascal también dio a conocer que se llevarían a cabo nuevas acciones en gobiernos regionales, parlamentos y ayuntamientos para detener lo que denominó como "el golpe de Sánchez".
La promulgación de una ley de amnistía que cubra a todos los implicados en el intento de secesión de Cataluña en 2017 es una de las condiciones Junts per Catalunya y Esquerra Republicana de Catalunya (ERC) para apoyar la investidura del líder socialista, a la que se tendrá que enfrentar antes del 27 de este mes.