Estados Unidos está siguiendo el desarrollo del sistema láser israelí Iron Beam (Rayo de Hierro) a cargo de la compañía Rafael y está dispuesto a considerar su uso para sus propias necesidades si esta tecnología se muestra eficaz en combate, señaló el subsecretario del Ejército para Adquisiciones, Logística y Tecnología, Douglas Bush.
"Si [los israelíes] tienen éxito, eso ciertamente podría ser algo que el Ejército podría considerar para aprovechar", dijo el militar citado por Defense News. Bush calificó la tecnología de "intrigante" y señaló que pudo ver un prototipo del sistema durante su último viaje a Israel.
El presupuesto de la administración de Biden, de aproximadamente 106.000 millones de dólares, en "financiación suplementaria de emergencia" incluye una inversión de 1.200 millones de dólares en el sistema de armas de energía dirigida de Israel, precisó.
Además del interés en el arma láser israelí, el Ejército de EE.UU. está impulsando sus propios proyectos de energía dirigida, destinados contra misiles y proyectiles de artillería y morteros, así como vehículos aéreos no tripulados. El programa está a cargo de Dynetics y Lockheed Martin.
El Iron Beam, de 100 Kw de potencia, está diseñado para interceptar una amplia gama de municiones entrantes y drones en un rango desde cientos de metros hasta varios kilómetros. El sistema puede integrarse en múltiples plataformas y ser un interceptor complementario a cualquier sistema de defensa aérea multicapa.