El ministro de Asuntos Exteriores de Rusia, Serguéi Lavrov, y su homólogo de Venezuela, Yván Gil, destacaron este jueves el avance del proceso de desdolarización.
Durante una conferencia de prensa conjunta, el canciller venezolano señaló que la plataforma de pagos rusa MIR ya está funcionando en todo el territorio del país latinoamericano. De acuerdo con sus palabras, también hay avances en otros aspectos, especialmente en el ámbito de comunicación financiera entre los Bancos Centrales de ambos países. Así, se produce "el intercambio cada vez más fluido en materia técnica, tecnológica", para que muy pronto, en el marco del proceso de desdolarización, "nosotros podamos establecer comercio entre monedas locales".
"Creemos que la contribución en el marco del BRICS va a ser fundamental para crear precisamente ese proceso de desdolarización", dijo Gil.
En ese contexto, indicó que la medida en cuestión puede "proteger de la aplicación de sanciones con el uso de la hegemonía del dólar como un medio de presión política a nuestros Gobiernos".
"Ya ha comenzado el proceso"
Por su parte, Lavrov indicó que se presta mucha atención "a este aspecto de nuestra cooperación", es decir, a la creación de mecanismos que "van a proteger nuestros lazos comerciales-económicos y de inversiones del dictado de Estados Unidos y sus satélites".
Aparte del uso de la tarjeta bancaria MIR, Lavrov señaló que Moscú y Caracas implementan también el sistema de transmisión de mensajes financieros del Banco Central ruso.
En lo que respecta al nivel multilateral, el ministro de Exteriores ruso destacó que, dentro del BRICS "ya ha comenzado el proceso, en el marco del cual, en la última cumbre en Johannesburgo, los líderes instruyeron a los ministros de Finanzas y jefes de Bancos Centrales a presentar recomendaciones sobre plataformas de pago alternativas".
Lavrov dijo que la aspiración del abandono del dólar se observa no solo en el bloque BRICS. Así, el presidente brasileño, Luiz Inácio Lula da Silva, propuso que la Celac también trabajara para "proteger sus lazos comercial-económicos" del abuso del papel del dólar. "Es un proceso sano, va a contribuir a la desmonopolización del ámbito de pagos internacionales, por lo que solo se hará más sostenible y más eficaz y menos expuesto a planes egoístas y discriminatorios de determinados países occidentales", destacó.