La noche del sábado al domingo se produjo un fuerte deterioro de las condiciones meteorológicas en varias zonas de Siberia (Rusia), especialmente en la región de Altái y las provincias de Kémerovo y Novosibirsk.
Los fuertes vientos con ráfagas que alcanzan los 35 m/s ya han provocado daños materiales. La intensa ventisca ha arrancado tejados de edificios, derribado árboles y volcado coches. Por ejemplo, en la ciudad de Bisk el viento arrancó la cúpula de una iglesia. También se informa que en varias zonas se produjeron cortes de electricidad.
Además, en la ciudad de Novokuznetsk, el viento incluso provocó la caída un cartel de un centro comercial sobre una mujer. De acuerdo con RIA Novosti, que cita a las autoridades locales, la mujer, de 59 años, fue hospitalizada en estado de gravedad media.
Las autoridades de la ciudad también informaron que dos personas, un hombre de 58 años y una mujer de 60, murieron después de que un árbol cayera sobre su coche. Dos personas más, que también se encontraban en el vehículo, resultaron heridas y fueron hospitalizadas.
Además, según reportes, una mujer falleció en la región de Altái al intentar retener el tejado de la casa, que estaba arrancado por el viento, y murió como consecuencia de sus heridas antes de la llegada de los médicos.