La Fiscalía de Paraguay investiga a 17 funcionarios de la oficina de Interpol en Asunción, que fueron separados de la fuerza por el presunto sabotaje en el expediente del narcotraficante uruguayo Sebastián Marset.
El personal señalado fue separado de la institución ante la eliminación de la orden de captura internacional contra Gianina García Troche, esposa de Marset, y uno de sus cómplices. Todos ellos tenían acceso a la red, y por lo tanto podían modificar los datos.
"Estamos investigando la probable existencia de hechos punibles que van desde sabotaje, alteración de datos y frustración de la persecución, en principio", dijo en una rueda de prensa la fiscal a cargo del caso, Ruth Benítez.
A la espera de un informe clave
Benítez afirmó que cuando se trata de cambios en la red esto queda registrado y que se puede llegar a los autores mediante el registro del usuario y la contraseña. "El servidor está en la base central, en la secretaría general con base en Lyon, Francia. Entonces, mediante los informes y asistencia jurídica internacional vamos a urgir de manera a tener esos reportes", sostuvo.
La fiscal Benítez detalló que la orden de captura fue eliminada el pasado 26 de octubre, y pesaba no solo sobre la pareja de Marset sino también sobre uno de sus presuntos cómplices en el caso 'A Ultranza Py', identificado como José Fernando Estigarribia.
Este jueves, a través de un comunicado oficial, el Ministerio Público de Paraguay informó: "Los agentes fiscales Manuel Doldán y Deny Pak, de Asuntos Internacionales y de Lucha contra el Narcotráfico, respectivamente, solicitaron informe a Interpol sobre el levantamiento del código rojo que pesaba sobre Gianina García Troche, uruguaya, esposa de Sebastían Marset, ambos imputados por tráfico de drogas y otros delitos en Paraguay".
Quién es Sebastián Marset
Marset, de 31 años, es señalado de ser el autor intelectual del asesinato del fiscal contra el crimen organizado de Paraguay, Marcelo Pecci, ocurrido el año pasado en Colombia.
Además, está acusado de integrar el denominado Primer Cartel Uruguayo (PCU) y de ser jefe de una organización criminal en Paraguay dedicada al narcotráfico y lavado de activos.
El caso Marset desató también una grave crisis política en Uruguay, debido a la entrega de un pasaporte al narcotraficante por parte de las autoridades, mientras estaba encarcelado en Emiratos Árabes Unidos. En pocos días, dos ministros y dos altos cargos dimitieron y trascendió que la Fiscalía podría investigar incluso al presidente, Luis Lacalle Pou.
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