Revelan el dramático testimonio de la presunta víctima de violación de Dani Alves
Los testimonios de la joven de 23 años presuntamente violada por el futbolista brasileño Dani Alves, que se encuentra en prisión preventiva desde hace más de diez meses, acusado de abuso sexual, fueron dadas a conocer por la Audiencia de Barcelona, mientras se espera el juicio del caso, informa El Español.
En los documentos que recogen los testimonios, la joven describe de manera cronológica los hechos ocurridos la noche del pasado 30 de diciembre en la conocida discoteca Sutton, ubicada en un barrio acomodado de Barcelona, y calificó lo allí vivido como una situación de "angustia y terror".
El escrito, que concuerda con la versión que siempre ha mantenido la joven, asegura que los hechos tuvieron lugar en el reservado de la discoteca donde la víctima, junto a su prima y una amiga, fueron invitadas por Dani Alves y su acompañante para tomar algo. Aunque, en un primer momento, las jóvenes rechazaron la propuesta, terminaron aceptando ante la insistencia de los dos amigos.
"Una clara intención de satisfacer sus deseos sexuales"
Durante la fiesta, el futbolista comenzó a acercarse cada vez más a la joven, tomándole la mano en varias ocasiones para ponérsela en sus genitales, a lo que ella respondió retirándola de inmediato. A eso de las 3:20 de la madrugada, Alves se retiró hacia una puerta y le hizo un gesto a la víctima para que lo acompañara. Ella accedió porque —según su testimonio— no sabía que se trataba de un baño.
Una vez allí, Alves empezó a "manosearla con ánimo lascivo y una clara intención de satisfacer sus deseos sexuales". Cuando la joven intentó marcharse, el deportista se lo impidió, con una actitud "violenta y despectiva", haciendo que la víctima se sintiera "impresionada y sin capacidad de reacción, llegando a sentir que incluso le faltaba el aire, dada la situación de angustia y terror ante lo que estaba viviendo".
A continuación, Alves penetró vaginalmente a la joven, sin preservativo, y después salió del baño dejándola allí. La joven salió unos minutos después, "aturdida y desorientada", y cuando intentó hablar con su prima para pedirle que se marcharan del lugar, se derrumbó y rompió a llorar hasta que fue atendida por el personal de la discoteca, que activó el protocolo frente a agresiones sexuales, mientras Alves abandonaba el establecimiento.
El pasado jueves, la Fiscalía española dio a conocer que ha pedido nueve años de cárcel para Alves, así como diez años de libertad vigilada y una indemnización de 150.000 euros para la presunta víctima, que el jugador ya consignó. El pasado mes de julio, una juez ya consideró que había indicios suficientes para procesar al futbolista.