Los deportes en formato 'phygital' (es decir, que combinan el deporte clásico con el ciberdeporte) están ganando cada vez más popularidad en Rusia. La decisión de combinar deportes reales y juegos de simulación fue verdaderamente revolucionaria. En el marco de las fases de clasificación de los Juegos del Futuro 2024, que comenzarán en tres meses y reunirán a 2.000 participantes en 21 disciplinas, ya se celebraron competiciones de fútbol y baloncesto.
Mientras tanto, en noviembre, se llevó a cabo en la ciudad rusa de Kazán un torneo de hockey 'phygital'. Las normativas eran idénticas a las reglas de otras disciplinas similares. Primero, los participantes determinaron al más fuerte en la etapa digital y luego salieron al hielo, donde jugaron durante tres períodos de siete minutos en formato de cuatro contra cuatro.
Falta de experiencia en el ciberdeporte
La recompensa no solo era la copa del torneo, sino también la clasificación hacia los Juegos del Futuro. Un total de seis equipos rusos —Liga Pro Team, HC BUTYRKA, NBSK, RFSO Lokomotiv, 3FRENZY y ZaryaD— se enfrentaron en el desafío. De ellos, el último fue encabezado por el tres veces campeón del mundo, Danís Zarípov.
A pesar de que su hijo Artur también salió sobre el hielo, el equipo no logró vencer a sus rivales. Aunque haya abierto el marcador en ambos partidos de la fase de grupos, ZaryaD sufrió dos derrotas y no logró llegar a los 'playoffs'. La falta de experiencia en los ciberdeportes no pasó desapercibida.
"Queríamos intentar anunciar el equipo. Dimos los primeros pasos, pero el resultado de momento es decepcionante: no pudimos llegar a las semifinales. Pero aprendemos de los errores. Tenemos un largo camino por delante. Intentaremos sacar las conclusiones correctas. En el próximo torneo todo será diferente", prometió el campeón.
Un equipo equilibrado
Los equipos que tenían todos los puntos a favor eran los que reunieron una plantilla equilibrada, compuesta tanto por jugadores de hockey profesionales, como también por excelentes 'gamers'. En primer lugar, se trataba de Liga Pro Team que, por un lado, contaba con el mejor debutante de la temporada 2010/11 de la Liga Continental de Hockey (KHL), Pável Zdunov, junto al ganador de la Copa Gagarin, Vladímir Malinovski, y, por el otro, con el campeón de Rusia en disciplinas de deportes electrónicos, Ígor Mótov.
Además de Liga Pro Team, el Lokomotiv llegó a las semifinales del grupo B, derrotando a ZaryaD en la disputa por el segundo puesto. HC BUTYRKA primero perdió inesperadamente ante 3FRENZY y luego venció al NBSK. Pero, NBSK no dejó ninguna posibilidad a 3FRENZY en el fatídico enfrentamiento por los 'playoffs'.
Un enfrentamiento tenso
El resultado de las semifinales se decidió, en gran medida, en la sección cibernética. NBSK anotó ocho goles sin respuesta contra sus oponentes. Entre los ganadores, se destacó Andréi Maksímov, al anotar un doblete. El segundo partido de 'playoffs' transcurrió de forma similar. En el escenario digital, Liga Pro Team consiguió una diferencia de ocho goles, marcando 10-2.
Mientras tanto, los partidos decisivos proporcionaron una intriga apasionante. Para empezar, HC BUTYRKA arrebató la medalla de bronce a Lokomotiv. La parte digital terminó en empate, pero ya sobre hielo, el equipo marcó tres goles en pocos minutos y se aseguró el tercer lugar.
La final resultó ser el punto culminante del torneo. NBSK, al inicio del partido en el simulador, consiguió una ventaja de dos goles. Pero, Liga Pro Team se recuperó rápidamente, y en el último momento tomaron ventaja al anotar 5-2. Hay que destacar que, sobre el hielo NBSK no quiso darse por vencido, y 11 segundos antes del descanso Vladislav Korotki intentó reducir la distancia hacia la victoria con la ayuda inmediata de Maksímov.
El secreto del éxito
A continuación, Liga Pro Team y NBSK lucharon por el triunfo, pero fueron los jugadores del primer equipo los que ganaron y despejaron el camino hacia los Juegos del Futuro. El principal secreto del éxito, según los campeones, no fue solo una composición fuerte, sino también la unión. "Las emociones son increíbles. Hace mucho tiempo que no experimentamos esto. La final resultó muy buena tanto en la parte cibernética como sobre el hielo. NBSK estuvo completamente bien. Simplemente tuvimos un poco más de suerte", explicó el capitán Serguéi Filippov.
"Hemos trabajado duro e inmediatamente nos habíamos fijado una meta. Más la disciplina y el profesionalismo. En el vestuario todo era estricto y eso dio sus frutos. También es importante que todos se hicieron amigos. De hecho, el equipo era un solo mecanismo, cada uno luchaba por su compañero", reveló.