La NASA quiere eludir la prohibición de EE.UU. para poder acceder a muestras lunares de China
Los investigadores de la NASA pidieron permiso al Congreso estadounidense para colaborar con la Administración Espacial Nacional de China (CNSA) como excepción a la prohibición vigente, pues lo consideran necesario para acceder a muestras lunares únicas recogidas por el gigante asiático. Se trataría de la primera cooperación de este tipo entre las agencias espaciales de ambos países, informa South China Morning Post.
Estados Unidos aplica actualmente la llamada 'Enmienda Wolf', aprobada por el Congreso estadounidense en 2011, que prohíbe a la NASA cooperar con China sin el permiso de los legisladores.
En un correo electrónico interno enviado el miércoles a sus "distinguidos colegas", la agencia espacial estadounidense afirmó que había "certificado su intención ante el Congreso" de permitir a los investigadores financiados por la NASA solicitar a la CNSA el acceso a las muestras lunares recogidas por la misión china Chang'e-5 en 2020.
El correo electrónico deja claro que la solicitud es un caso excepcional debido al "valor único" de las muestras chinas, que "se han puesto recientemente a disposición de la comunidad científica internacional con fines de investigación." "Esta autorización se refiere específicamente a las muestras de la misión Chang'e-5; la prohibición normal de actividades bilaterales con la República Popular China en proyectos financiados por la NASA sigue vigente", reza el documento.
"La solicitud de las muestras proporcionará a los investigadores de Estados Unidos las mismas oportunidades de investigación que a los científicos de todo el mundo", señala la agencia. Según el correo electrónico, las muestras proceden de una región lunar "aún no explorada por la NASA" y se espera que proporcionen valiosos conocimientos sobre la historia geológica de la Luna y el sistema Tierra-Luna, y posiblemente ayuden a la NASA a desarrollar futuros planes de exploración lunar, señala el documento.
En 2020, la nave espacial china Chang'e-5 recogió 1.731 gramos de suelo lunar durante una misión de 23 días, lo que supuso la primera recuperación exitosa de muestras lunares en las casi cinco décadas transcurridas desde que finalizó el programa Apolo de la NASA. Una vez concluida con éxito la misión, China compartió las muestras de dos mil millones de años de antigüedad con otros países.
Algunas de ellas se entregaron a institutos y universidades de China, mientras que otras se utilizaron para exposiciones públicas y como regalos diplomáticos para Rusia y Francia.