Diplomáticos chinos desestimaron las preocupaciones sobre ciberseguridad y posible espionaje planteadas por el presidente de Costa Rica, Rodrigo Chaves, cuando explicó por qué no quiere que la empresa tecnológica china Huawei opere en su nación las redes 5G.
"El país donde está basado Huawei no tiene un régimen jurídico sólido para prevenir el espionaje", afirmó el mandatario en una rueda de prensa el miércoles. Chaves insinuó también que el Estado chino obliga a sus empresas nacionales a "pasarle al Estado toda la información que pueda requerir", algo que las autoridades en San José perciben como riesgoso para la seguridad.
La Embajada de China en San José aseguró el jueves que las "acusaciones sobre ciberseguridad carecen de fundamento" y criticaron la postura del Gobierno del país centroamericano. China "rechaza rotundamente" todo comportamiento criminal, declaró la misión diplomática, añadiendo que también se opone a la politización de las cuestiones científicas y tecnológicas.
Chaves firmó en agosto pasado un decreto que prohíbe a las empresas de países que no hayan aceptado el Convenio de Budapest sobre Ciberdelincuencia participar en el desarrollo local de las redes de comunicación 5G.
Sin embargo, Huawei sigue proporcionando al Gobierno costarricense otros servicios de telecomunicaciones. Además, la empresa está actualmente esperando un fallo del Tribunal Constitucional de Costa Rica, tras plantear en esa instancia que el trato que recibe por parte del Ejecutivo local es injusto. La disputa puede socavar los lazos económicos de San José con el gigante asiático, algo que los diplomáticos chinos ya advirtieron en el pasado.