Los discursos optimistas del presidente ucraniano, Vladímir Zelenski, están creando una brecha entre su Administración y los jefes militares del país por estar lejos de la realidad, informó este lunes Financial Times, citando a funcionarios ucranianos.
Las afirmaciones del mandatario ucraniano, cuyo mensaje principal es "estamos avanzando", tienen como objetivo tranquilizar a la población, y atraer más inversiones y ayuda militar desde Occidente, comunicaron las fuentes. Sin embargo, esa estrategia de comunicación y censura estricta de las malas noticias, aplicada en todos los niveles estatales, crea "expectativas exageradas" que "no corresponden al estado real de las cosas", advirtió Irina Zolotar, asesora y jefa de comunicaciones del exministro de Defensa de Ucrania, Alexéi Réznikov.
Zolotar indicó que las autoridades debían demostrar un "realismo equilibrado". "Para que la sociedad no construya castillos en el aire y se quite las gafas de color rosa […] es necesario dejar de tener miedo de decir la verdad", afirmó la asesora, agregando que la estrategia del presidente hizo pensar a los líderes occidentales por qué deberían ayudar a Ucrania si Kiev está siempre "al borde de la victoria".
"Necesitamos agregar más realismo", destacó una persona vinculada a la estrategia de comunicación presidencial. Los funcionarios ucranianos temen que la semejante estrategia de Zelenski pueda socavar la confianza de la población y la comunidad mundial. "A veces, la lucha –comunicar lo que está ocurriendo en la vida real– dice más que una foto bonita de la lucha", sostuvo un exfuncionario de alto cargo.
Al mismo tiempo, los funcionarios subrayaron que, inicialmente, la estrategia funcionaba bien, pero actualmente, según Oksana Romaniuk, directora del Instituto de Información Masiva de Ucrania, una organización de supervisión de los medios de comunicación, "casi todo el mundo en Ucrania tiene familiares o amigos que luchan o que han sufrido directamente la guerra", por lo que no se puede esconder la realidad. "Si no hay información negativa, acabará con la confianza hacia el Gobierno", destacó Romaniuk.
Además, el medio citó el ejemplo del fracaso de la estrategia de comunicación presidencial, afirmando que, en los medios ucranianos y las cuentas oficiales de las autoridades del país, la ciudad de Artiómovsk (conocida como Bajmut en Ucrania) fue calificada de "fortaleza". Esas afirmaciones desaparecieron días antes de que las fuerzas rusas tomaran la localidad, pero Zelenski todavía no ha reconocido la derrota de las fuerzas ucranianas en esa batalla.