Las Fuerzas de Defensa de Israel (FDI) utilizaron municiones de fósforo blanco, suministradas por EE.UU., en sus ataques contra el territorio libanés en octubre, reporta The Washington Post (WP) al recoger el testimonio de un corresponsal suyo.
De acuerdo con el periódico, los códigos de producción hallados en los proyectiles coinciden con la nomenclatura usada por los militares estadounidenses para catalogar las municiones de fabricación doméstica. Se trata en particular de proyectiles utilizados por las FDI contra la ciudad de Dhayra, en lo que, según Amnistía Internacional, "fue un ataque indiscriminado que hirió al menos a nueve civiles y dañó bienes de carácter civil".
Según esos indicios, los explosivos de fósforo blanco fueron fabricados en los estados de Arkansas y Luisiana entre 1989 y 1992.
De otra parte, el origen estadounidense de las municiones fue verificado por organizaciones de derechos humanos. "El hecho de que el fósforo blanco fabricado en EE.UU. sea usado por Israel en el sur del Líbano tiene que ser una gran preocupación para los funcionarios estadounidenses", afirmó Tirana Hassan, directora ejecutiva de Human Rights Watch. Y agregó que ante esos hechos, el Congreso de EE.UU. debe reconsiderar la ayuda militar de Washington a Tel Aviv.
Entre tanto, el portavoz del Consejo de Seguridad Nacional de la Casa Blanca, John Kirby, dijo este lunes que la administración Biden está "preocupada" por el uso de fósforo blanco y "formulará preguntas para saber un poco más". "Siempre que proporcionamos artículos como el fósforo blanco a los militares de otros países, es con la plena expectativa de que sea utilizado en virtud de los objetivos legítimos y del derecho en los conflictos armados", aseveró.
A mediados de noviembre, varias grabaciones sobre el uso de municiones de fósforo blanco contra el sur del Líbano por parte de las FDI fueron difundidas por el equipo de RT.
¿Qué peligros representa el fósforo blanco?
El fósforo blanco es una sustancia incendiaria que se utiliza bélicamente para crear una densa cortina de humo o marcar objetivos. Cuando se expone al aire, arde a temperaturas extremadamente altas, al punto de que incluso puede continuar quemándose dentro de la carne de seres vivos. Se trata de una sustancia que no se puede eliminar con agua, que "provoca un dolor terrible y lesiones que cambian la vida", explica Amnistía.
El derecho internacional humanitario restringe el uso de fósforo blanco y prohíbe disparar tales municiones contra zonas civiles pobladas, infraestructuras civiles o cerca de ellas, "debido a la alta probabilidad de que los incendios y el humo que provoca se propaguen". "Esos ataques, que no distinguen entre civiles y combatientes y objetivos militares, son indiscriminados y por tanto están prohibidos", precisa el organismo.