La noche del 7 de diciembre, cuando en Colombia se celebra el Día de las Velitas, que da inicio a la Navidad, Michel Dayana González salió de su casa para comprar dulces y un encargo para una vecina. A partir de ese momento, no volverían a verla con vida.
Las cámaras de seguridad registraron parte de su recorrido, sin embargo, su paradero no pudo determinarse, por lo que las alarmas familiares se encendieron.
Las pistas apuntaban a un taller cercano donde trabajaba como vigilante Harold Andrey Echeverry, quien ha sido detenido y señalado de cometer femicidio agravado contra la menor. El padre de la niña, Genaro González, le preguntó, con una foto en la mano, sobre su hija, a lo que el presunto responsable negó en dos oportunidades que la hubiera visto, recoge El Tiempo.
Al parecer, la víctima habría sido llevaba bajo engaño al local donde laboraba Echeverry. En el lugar encontraron manchas de sangre y autos golpeados, lo que indicaría que la adolescente luchó con su femicida antes de ser abusada sexualmente y asesinada, según declaró el padre a El Universal.
Finalmente, su cuerpo fue hallado desmembrado en una maleta y en un recipiente de basura.
Las reacciones
Al conocerse la captura de Echeverry, el padre de la víctima, agradeció a "toda una ciudad" que estuvo volcada en las calles para pedir justicia tras lo ocurrido.
"Les pido a los jueces que sean contundentes, que no busquen excusas para dejar libre a esta persona", dijo en unas declaraciones a los medios.
Por otra parte, la procuradora general, Margarita Cabello, informó que solicitará a la Fiscalía que se establezca la pena máxima contra el victimario, que en Colombia corresponde a 60 años.
En las redes circularon imágenes donde los habitantes de la comunidad del barrio San Judas celebraron la detención frente al taller mecánico donde ocurrió el crimen.
La huida
El presunto femicida habría salido del taller donde trabajaba en una moto que le robó al local, el mismo día que se encontró el cuerpo de la adolescente. El sujeto había intentado vender horas antes el vehículo, sin éxito, en dos lugares de Cali, de acuerdo con un boletín de prensa publicado por la Policía.
Las instrucciones eran muy claras: "Que todos los policías de Cali y sus alrededores tuviesen en sus celulares la fotografía del sospechoso". Además, se debía crear un equipo especial con expertos en investigación criminal, inteligencia y Grupo de Acción Unificada por la Libertad Personal (Gaula).
Al llegar al corregimiento del Chicoral (Tolima) habría intentado camuflarse entre comunidades religiosas y habría pedido ayuda para rentar una habitación. No obstante, su plan era continuar hacia Villavicencio, a 248 kilómetros.
Una vez en la capital del Meta, Echeverry hizo una serie de "contactos que resultaron determinantes en la investigación", se explicó en el comunicado de la Policía, y una llamada alertó sobre un sospechoso, que fue fotografiado con una gorra negra y mascarilla.
La captura
El director general de la Policía, William Salamanca, informó en un video sobre la captura de Echeverry en la ciudad de Villavicencio (Meta). En las imágenes se observa el momento de la detención del presunto responsable de femicidio, que fue trasladado a Cali, donde fue puesto a la orden de la Fiscalía.
El funcionario afirmó que "en cuestión de horas", los equipos especiales de la Dirección de Investigación Criminal (DIJIN), inteligencia y el Gaula encontraron el rastro del presunto agresor en el corregimiento de Chicoral (Tolima) y lo siguieron hasta la capital del Meta, con la ayuda de la ciudadanía.
Por información que condujera a la aprehensión del prófugo, se había ofrecido una recompensa de 100 millones de pesos (unos 25.000 dólares).
La captura ocurrió el pasado lunes, a eso de las 4:30 de la tarde, en el barrio La Porfía, según manifestaron las autoridades en una rueda de prensa.
El comandante de la Policía de Cali, Daniel Gualdrón, reveló que desde 2019 el agresor había sido capturado por el delito de violación y que posteriormente quedó en libertad. Al parecer tenía dos denuncias por este tipo de delitos.