Biden reacciona a la decisión de la Cámara de Representantes de formalizar la investigación de juicio político en su contra
El presidente estadounidense, Joe Biden, acusó este miércoles a los republicanos de la Cámara de Representantes de "perder el tiempo en un ardid político sin fundamento", comentando la aprobación de una resolución para formalizar una investigación de juicio político contra él.
En un comunicado publicado en el sitio web de la Casa Blanca, Biden afirmó que "el pueblo estadounidense necesita que sus líderes tomen medidas sobre prioridades importantes para la nación y el mundo", refiriéndose al apoyo de Washington a Ucrania e Israel, así como a la situación en la frontera sur de EE.UU. y los problemas económicos. En este contexto, acusó a los republicanos en el Congreso de "no actuar para ayudar" y de no "actuar para financiar al Gobierno y las prioridades críticas para mejorar la vida de los estadounidenses".
Asegurando que él "se levanta cada día centrado en los problemas a los que se enfrenta el pueblo estadounidense", acusó a los republicanos de la Cámara de Representantes de no apoyarle. "En lugar de hacer algo para ayudar a mejorar la vida de los estadounidenses, se centran en atacarme con mentiras. En lugar de hacer su trabajo urgente que hay que hacer, están prefiriendo perder el tiempo en este ardid político sin fundamento [...] que no está respaldado por hechos", dijo.
Previamente este mismo día, la Cámara de Representantes aprobó por 221 votos a favor y 212 en contra la resolución presentada la semana pasada, que pide a los Comités del Poder Judicial, de Supervisión y de Medios y Arbitrios que determinen "si existen motivos suficientes" para acusar a Biden, a quien han venido investigando por supuestamente beneficiarse de las actividades de negocios en el extranjero realizadas por su hijo Hunter.
De acuerdo con los congresistas republicanos que lideraron la iniciativa, esta decisión les dará mayores poderes para reunir pruebas que podrían demostrar la supuesta participación del inquilino de la Casa Blanca en casos de corrupción y sobornos mientras se desempeñaba como vicepresidente, durante el mandato de Barack Obama (2009-2017).