La muerte de tres rehenes israelíes retenidos por el movimiento palestino Hamás a manos de las Fuerzas de Defensa de Israel (FDI) como consecuencia de disparos erróneos durante combates en Gaza es desgarradora, afirmó este sábado el primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, citado por AFP.
"Me rompió el corazón. Le rompió el corazón a toda la nación", señaló Netanyahu. "Con todo el profundo dolor, quiero aclarar: la presión militar es necesaria tanto para devolver a los secuestrados como para lograr la victoria sobre nuestros enemigos", manifestó.
Las noticias sobre el asesinato de los rehenes causaron protestas, en las cuales participaron familiares de otras personas retenidas por Hamás, instando a Netanyahu a volver a la mesa de negociaciones.
"Inicialmente, nos explicaron que la operación terrestre recuperaría a los secuestrados", dijo Ruby Chen, padre de un militar israelí cautivo por Hamás. Sin embargo, esto "no funciona" porque "los secuestrados regresan, pero no tan vivos", añadió.
Este mismo día, el ministro de Defensa del país hebreo, Yoav Gallant, también se pronunció acerca del incidente. "Como ministro de Defensa, soy responsable de todo lo que ocurre en el sistema de seguridad y todo lo que ocurre en esta guerra, los logros, los costos y los graves errores. Lo mismo se aplica al incidente de ayer", declaró.