El Departamento de Defensa de EE.UU. estudia las posibilidades de atacar la infraestructura militar de los hutíes yemeníes para disuadir sus agresiones contra los buques militares y comerciales en el mar Rojo, reportó este sábado el medio estadounidense Semafor, citando a funcionarios de la administración Biden.
De acuerdo con las fuentes, Washington está profundamente preocupado por los ataques de los hutíes, que tratan de cortar el comercio de Israel y aumentar los costos para EE.UU. y sus aliados por su apoyo al país hebreo en su conflicto con el movimiento palestino Hamás. Agregaron que algunas empresas navieras ya desvían su tráfico comercial desde el mar Rojo y el canal de Suez hacia las rutas del Cuerno de África, lo que aumenta considerablemente el tiempo y los costos de tránsito.
Por otro lado, los interlocutores destacaron que la Casa Blanca no quiere que el conflicto en Gaza prolifere a toda la región. En particular, de ser tomada, la decisión de atacar la infraestructura militar de los hutíes, puede llevar a la escalada del conflicto con Irán y las agrupaciones chiitas en Irak y Siria, que ya han atacado reiteradamente a las tropas estadounidenses desplegadas en estos países.
Según opina Michael Nagata, general retirado que supervisó las Fuerzas de Operaciones Especiales de EE.UU. en Oriente Medio durante el mandato de Barack Obama, "hay algo parecido a una guerra no declarada entre Irán y EE.UU. cuando se trata de los ataques y las represalias que tienen lugar fuera de Israel". "Es una tendencia peligrosa. No creo que haya cualquier forma de predecir a dónde irá esto en este punto", añadió.
Este jueves, se reportó que EE.UU. lanzó reiteradas advertencias a los hutíes mediante diferentes canales para que dejen de atacar barcos en el mar Rojo y el territorio israelí. Entre tanto, la semana pasada los hutíes anunciaron que atacarían "cualquier barco que se acercara a Israel".
"Si la Franja de Gaza no recibe los alimentos y medicinas que necesita, todos los barcos que naveguen por el mar Rojo con destino a puertos israelíes, independientemente de su nacionalidad, se convertirán en objetivo de nuestras Fuerzas Armadas", destacaron.