Bloomberg: Países árabes dificultan la respuesta de EE.UU. a los ataques hutíes contra los buques
Los desacuerdos entre los aliados árabes de Estados Unidos dificultan el intento de Washington de forjar una respuesta coherente a los ataques de los hutíes yemeníes contra los buques que transitan por el mar Rojo, reporta Bloomberg citando a sus fuentes familiarizadas con el asunto.
Dos países clave de la región implicados en la larga guerra civil de Yemen —Emiratos Árabes Unidos y Arabia Saudita— mantienen posturas opuestas hacia los hutíes, lo que presenta un importante obstáculo para el Gobierno estadounidense que busca poner fin a los ataques en el mar.
La agencia reportó a principios del mes que EE.UU. baraja la opción de una respuesta militar contra los hutíes, que podría incluir ataques contra los objetivos del grupo, pero todavía prefiere resolver el problema por medio de la diplomacia y trabaja con sus aliados occidentales y árabes para reforzar la protección marítima que garantizaría la navegación segura por el mar Rojo.
Un funcionario estadounidense comentó a Bloomberg que la Casa Blanca ha mantenido contacto con los hutíes a través de Omán y algunos otros intermediarios, y un portavoz del grupo rebelde confirmó la existencia de los contactos. Sin embargo, indicó que van a proceder con los ataques hasta que Israel cese los combates en Gaza.
Un funcionario yemení, apoyado por Abu Dabi, señaló que Emiratos Árabes Unidos aboga por acciones militares y quiere que EE.UU. designe a los hutíes como terroristas.
Arabia Saudita, en cambio, apoya un enfoque más mesurado, por temores de que cualquier acto beligerante provoque más agresiones de parte de los hutíes y ponga en peligro la frágil tregua en la guerra yemení, frustrando el intento de Riad por alcanzar un alto el fuego permanente con los rebeldes, señaló un miembro del equipo saudí que negocia con los hutíes.
Entretanto, el incremento de los ataques de los hutíes contra los cargueros y buques cisterna genera cada vez más preocupaciones en las navieras. Además de hacer disparar los precios de los seguros, los ataques obligaron a las compañías a modificar las rutas para evitar el paso por el mar Rojo.
Así, MSC Mediterranean Shipping Co, la mayor naviera de contenedores del mundo, anunció el pasado sábado que sus buques no van a navegar por el canal de Suez. La decisión de optar por una ruta más segura a través del cabo de Buena Esperanza en Sudáfrica sale más costosa y alarga los viajes, al suponer miles de kilómetros adicionales en los trayectos entre Europa y Asia.
La danesa A.P. Moller-Maersk A/S y la francesa CMA CGM también decidieron abstenerse de enviar sus buques por el mar Rojo, mientras que Orient Overseas Container Line (OOCL), basada en Hong Kong, dejó de aceptar los cargamentos procedentes desde y hacia Israel hasta próximo aviso debido a problemas operacionales.