La Policía del estado australiano de Nueva Gales del Sur ha frustrado un presunto complot criminal en Sídney y las pistas la han llevado a un alijo de cocaína por un valor de más de 1.000 millones de dólares, reportó este martes el periódico The Guardian.
Los agentes respondieron a una llamada sobre un allanamiento de morada en un bloque residencial la mañana del lunes y encontraron a cuatro jóvenes sentados en un sedán Toyota Yaris en el aparcamiento subterráneo vestidos con ropa negra y con sus caras cubiertas. A continuación, hallaron en el vehículo una palanca de 60 centímetros, guantes, un cuchillo de carnicero y otro cuchillo afilado, un cúter, barras de luces intermitentes y bridas, herramientas que, a juicio de la investigación, eran consistentes con un intento de secuestro.
Después de identificar a un joven de 24 años a quien, según la Policía, los cuatro ocupantes del coche pretendían robar y secuestrar, los agentes llevaron a cabo el registro de su apartamento y encontraron allí 722 kilogramos de cocaína.
Los cuatro jóvenes, de 24, 23, 20 y 19 años, fueron arrestados y enfrentarán cargos de allanamiento de morada agravado con la intención de robar a mano armada, entre otros delitos, así como de su pertenencia a un grupo criminal. La potencial víctima también fue arrestada y el joven será acusado de suministrar drogas prohibidas en volúmenes comerciales y de involucramiento deliberado en el crimen.
"Solo este año, nuestros agentes arrestaron a 48 personas por presuntos delitos de secuestro y, a través de varias otras operaciones y fuerzas especiales frustraron una serie de otros actos violentos, como tiroteos en lugares públicos y homicidios", dijo a los medios el superintendente de Policía Joseph Doueihi. El oficial opinó que la respuesta rápida y eficaz debe convencer al público de la capacidad policial "para detener los crímenes violentos antes de que ocurran y poner a los responsables tras las rejas".