Israel está estableciendo las condiciones para que sus tropas vuelvan a ocupar la Franja de Gaza después de la guerra, afirmaron la semana pasada tres altos diplomáticos occidentales, citados por The Times of Israel.
Los funcionarios explicaron que el rechazo del primer ministro israelí Benjamín Netanyahu a que la Autoridad Palestina gobierne Gaza, su incapacidad para promover alternativas viables y la afirmación de que Israel mantendrá el control de la seguridad de la Franja están disuadiendo a otros actores de cooperar para rehabilitar el enclave después de la guerra.
"Dadas estas circunstancias, no veo un escenario más probable", expuso uno de los diplomáticos. "Trabajaremos para impedir la reocupación de Gaza, pero no hay voluntarios para gobernar allí además de la Autoridad Palestina, a la que el actual Gobierno israelí está decidido a debilitar, entonces, ¿dónde nos deja eso?", preguntó otro de los funcionarios. Mientras, el tercer diplomático se mostró de acuerdo con sus colegas.
A su vez, un alto asesor del presidente de la Autoridad Palestina, Mahmud Abbás, contó al medio israelí en diciembre que el Gobierno no aceptará regresar a la Franja de Gaza a menos que las fuerzas israelíes se retiren por completo y que se trate de una eventual solución de dos Estados.
Posición de otros países
Por su parte, los Emiratos Árabes Unidos, por ejemplo, han condicionado el apoyo financiero y político a la reconstrucción de Gaza después de la guerra al avance hacia el establecimiento de dos Estados.
EE.UU. ha elaborado "cinco principios" para la Gaza de posguerra: ningún desplazamiento forzoso, ni reocupación, ni asedio ni bloqueo, ni reducción del territorio, ni uso de Gaza como plataforma para el terrorismo. Igualmente, el portavoz del Departamento de Estado, Matt Miller, afirmó el lunes que "no puede haber reocupación de Gaza".
No obstante, Netanyahu ha insistido en que Israel mantendrá el "control general de seguridad" de la Franja después de la guerra, una opinión compartida por los altos funcionarios de Israel.