La periodista feminista Luciana Peker se autoexilia de Argentina por amenazas de muerte

Tras la victoria del libertario Javier Milei, la periodista y escritora argentina Luciana Peker anunció que se autoexiliará en el extranjero tras denunciar las crecientes amenazas contra su vida.

"Me voy porque durante todo el año hablamos de que estaba amenazada por el trabajo, por denunciar abusos sexuales", explicó en Radio con Vos una de las referentes más conocidas del influyente movimiento feminista de América Latina.

También explicó que se va por un tiempo indeterminado y con protección de organizaciones de derechos humanos para poder seguir escribiendo desde otro país. A juicio de la periodista, desde el triunfo de Milei ha recrudecido un clima de fuerte hostilidad contra las mujeres.

"Hay amenazas, les fui contando que provenían de personas que tienen dirección en el edificio de la Fuerza Aérea. Es una situación que no para de crecer. Haces un posteo y te ponen directamente stickers de armas disparándote", señaló.

Peker enumeró las desventajas que actualmente tienen para ejercer en Argentina las periodistas feministas. "Es un momento de mucha presión y censura, [...] perdemos [espacios en los] medios públicos y en los privados [...] cuesta mucho escribir con la palabra falsa de esta época que es la palabra 'libertad', que es lo que falta", dijo. "No hay condiciones hoy que garanticen ni la vida, ni la libertad, mucho menos la libertad de expresión y mucho menos de las mujeres, [...] es una Argentina que está cada vez más machista", aseguró.

Motivos

La autora responsabilizó de las agresiones al movimiento de mujeres no solo a este Gobierno, sino a su predecesor.

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"Parte de su estrategia [fue decir que] el feminismo 'no vende', lo cual agranda la validez de la ultraderecha. [...] Es parte de la violencia política de hoy […] Sí es responsabilidad del gobierno de esa idea de la campaña de demonizar al feminismo que nos expone mucho más", señaló.

Los medios tradicionales o corporativos también tienen mucha responsabilidad, agregó, ya que se sumaron a la campaña para reforzar la idea de que las mujeres que pelearon y lograron derechos se convirtieron en un factor que alejó a votantes, lo que a su vez envalentonó al nuevo Gobierno, cuyos integrantes están abiertamente en contra de los feminismos.

"La palabra periodística se ha monopolizado al lado de los varones de manera tremenda. [...] Las mujeres somos absolutamente perseguidas y demonizadas porque quieren justificar el ajuste con una nueva quema de brujas", acusó al defender al movimiento feminista de Argentina.

En un sentido autocrítico, Peker reconoció que cierta cooptación del movimiento y su burocratización lo terminaron invalidando en algunos sectores de la población. Sin embargo, aclaró, nada de ello justifica la violencia que están enfrentando las comunicadoras feministas.