El ministro de Asuntos Exteriores de Israel, Eli Cohen, ha dado instrucciones al ministerio del país para que no renueve el visado a un funcionario de la ONU en el país y lo deniegue a otro. Así lo anunció en la red social X el 25 de diciembre.
La decisión está relacionada con el descontento de las autoridades del país israelí con la actuación de la organización, que critica los bombardeos israelíes sobre la Franja de Gaza, en los que murieron numerosos civiles.
"¡No nos callaremos más ante la hipocresía de la ONU!", declaró el ministro. Acuso al jefe de la organización, al comisario de Derechos Humanos y a la agencia ONU Mujeres de legitimar "crímenes de guerra y crímenes contra la humanidad", publicar "libelos de sangre sin fundamento" e ignorar "actos de violación cometidos contra mujeres israelíes" durante dos meses.
"Dejaremos de cooperar con quienes colaboran con la propaganda de la organización terrorista Hamás", añadió.
Funcionarios de la ONU han criticado en repetidas ocasiones los bombardeos israelíes de zonas residenciales, escuelas y hospitales, así como las restricciones impuestas a las entregas de ayuda, durante el bloqueo total impuesto en Gaza tras los ataques del 7 de octubre. Estos ataques han matado a miles de personas, entre ellos decenas de periodistas y a más de un centenar de miembros del personal de la organización.
El secretario general de la ONU, António Guterres, ha pedido en repetidas ocasiones un alto el fuego y ha condenado la grave crisis humanitaria que ha llevado a los palestinos al borde de la inanición.