El representante permanente de Rusia ante la ONU, Vasili Nebenzia, este viernes en la reunión del Consejo de Seguridad de la ONU advirtió al régimen de Kiev y a sus aliados occidentales que les aguardan malas noticias sobre la situación en Ucrania.
"Los planes militares del régimen de Kiev han sido un fiasco total. Así que les aguardan las peores noticias a ustedes [países occidentales] y a sus apoderados ucranianos en un futuro muy próximo. Más allá de que Washington y Bruselas aprueben nuevos paquetes de ayuda financiera y militar para Zelenski y su pandilla, eso solo retrasará la agonía de su régimen, pero no la impedirá", declaró el diplomático.
"La gente [de Ucrania] entiende perfectamente que las autoridades del país la han traicionado. Que sus maridos, hermanos e hijos están siendo sacrificados por los objetivos geopolíticos de Occidente para constreñir a Rusia", afirmó. En este contexto, Nebenzia expresó que las autoridades ucranianas despliegan sistemas de defensa antiaérea en zonas residenciales en violación del derecho internacional, matando así a sus propios ciudadanos.
El representante ruso aseveró que los mismos residentes de Ucrania publican videos en los que "los misiles de defensa antiaérea ucranianos, habiendo fallado o desviándose de su curso, caen sobre viviendas y objetos civiles" y añadió que Rusia solo golpea la infraestructura militar del país. "Si Ucrania no violara las normas del derecho internacional, no habría víctimas", aseguró.
Además, Nebenzia señaló que la apuesta por resolver el conflicto ucraniano en el campo de batalla "resultó equivocada y fracasó", ya que "una victoria militar sobre Rusia es un objetivo absolutamente inalcanzable". "La realidad es que Ucrania no tiene ni tendrá los recursos no solo para lograr un avance, sino para al menos mantener la situación en la línea de contacto", destacó.
El diplomático sostuvo que el régimen del presidente ucraniano, Vladímir Zelenski, "ha llevado al país a una situación casi fatal", convirtiendo a Ucrania en "una empresa militar privada en manos de los países occidentales, cuyo objetivo es infligir el máximo daño a Rusia". Nebenzia indicó que el Estado ucraniano sobrevive únicamente gracias al dinero de Bruselas, Washington y Londres, a los que, por su parte, "no les importa en absoluto la vida de los ucranianos ordinarios".