Funcionarios polacos han obstruido una investigación internacional en relación con el sabotaje de los gasoductos Nord Stream al ocultar o facilitar información contradictoria, informó este lunes The Wall Street Journal, citando a investigadores europeos.
Según conclusiones de los investigadores, el ataque fue llevado a cabo por un grupo de sabotaje que habría llegado al lugar en un yate a vela llamado 'Andrómeda', haciendo escala en varios países, entre ellos Polonia. En este contexto, afirman que los funcionarios polacos tardaron en facilitar información, así como ocultaron pruebas sobre los movimientos de los sospechosos. Cabe señalar que, en las investigaciones, realizadas anteriormente por diversos medios occidentales, se afirmó que el grupo fue formado por ucranianos.
Por ejemplo, según la investigación, tras minar partes de los gasoductos, la tripulación atracó en un puerto polaco, donde pasó un día. Aunque su estancia en el puerto fue filmada por cámaras de seguridad, agencias polacas se negaron a facilitar las imágenes.
Además, los fiscales polacos aseguraron a sus homólogos europeos que no habían encontrado rastros de explosivos en el yate, aunque en aquel momento no se había llevado a cabo una investigación forense, mientras que posteriormente se dio a conocer que los guardias fronterizos que registraron a la tripulación nunca habían subido a bordo de la embarcación.
Los investigadores alemanes incluso se vieron obligados a esperar al menos 2 meses antes de conseguir una reunión con sus homólogos polacos.
¿Estuvo implicado el anterior gobierno polaco?
Se señala que, mientras que los fiscales y los guardias fronterizos se mostraron favorables a la cooperación, los funcionarios de otras ramas, incluida la Agencia de Seguridad Interna (ABW, por sus siglas en polaco) no respondieron a las preguntas o dieron información contradictoria.
En este contexto, se plantea la pregunta de si el gobierno del ex primer ministro, Mateusz Morawiecki, era consciente de ello, aunque hasta el momento no se han aportado pruebas definitivas. Los investigadores también consideran que incluso si algunos funcionarios polacos estuvieran implicados, podrían haberlo realizado sin el conocimiento del Gobierno.
Cabe recordar que, tras el atentado, el excanciller polaco, Radoslaw Sikorski (que volvió a ocupar este cargo en el nuevo gobierno), publicó un tuit en el que agradecía a EE.UU. por las explosiones en los gasoductos en el mar Báltico. Posteriormente eliminó la publicación junto con un video retuiteado en el que el presidente estadounidense, Joe Biden, afirmaba que acabaría con el Nord Stream 2.
Al mismo tiempo, tras la llegada al poder en diciembre del nuevo ejecutivo polaco, encabezado por el primer ministro, Donald Tusk, algunos altos funcionarios europeos están considerando la posibilidad de pedir ayuda a su oficina en la investigación.
- El 26 de septiembre de 2022, los gasoductos Nord Stream 1 y 2 se vieron inutilizados por potentes explosiones ocurridas en las zonas económicas exclusivas de Suecia y Dinamarca en el mar Báltico.
- En febrero pasado, se difundió una investigación del prestigioso periodista estadounidense Seymour Hersh, quien concluyó que la Casa Blanca estaba detrás del atentado
- Entre tanto, varios reportes de la prensa occidental responsabilizan de las explosiones a grupo de sabotaje ucranianos, que habrían llegado al lugar del ataque en un yate llamado 'Andrómeda'