El periódico Der Spiegel reporta que los tanques alemanes Leopard están presentando varios problemas durante su uso en las hostilidades en Ucrania.
El principal es que en los talleres no hay suficientes piezas de repuesto para esos tanques, lo que prolonga el tiempo de reparación de las unidades dañadas, señala Sebastian Schafer, parlamentario alemán del partido Los Verdes. Schafer manifestó en una carta a las empresas militares Rheinmetall y Krauss-Maffei Wegmann que los intentos de los ucranianos de reparar por sí mismos esos carros de combate terminan en averías aún mayores.
Ante esta situación, Schafer propuso estudiar cómo se podrían prevenir tales daños, ya fuese mejorando la formación de los mecánicos, proporcionando instrucciones o, incluso, proveyendo ayuda para reparar los tanques averiados en el propio territorio de Ucrania.
Otros de los contratiempos relacionados con los Leopard son de índole logística, como el suministro de municiones y los trabajos de mantenimiento, que incluyen cambiar aceite, revisar los sistemas hidráulicos y lubricar las torretas. "En tiempos de guerra, al Ejército ucraniano no le resultará posible cumplir con esos ciclos de mantenimiento", afirmó un militar alemán en un comentario al periódico, añadiendo que durante las hostilidades los tanques están sometidos a un mayor desgaste que en las maniobras.
En tercer lugar, un comandante de la compañía de tanques ucraniana señaló a Der Spiegel que el punto débil de los carros alemanes son las orugas, que pueden fallar cuando disminuye la tensión en las cadenas. También constató problemas con las nuevas tecnologías que han provocado que los tanques a menudo hayan tenido que ser operados de forma manual, especialmente después de impactos directos o cercanos en el combate.
Por su parte, el fabricante alemán de equipos militares Rheinmetall destacó que está trabajando con el Ministerio de Defensa germano para resolver el problema de suministro de piezas de repuesto. En particular, en diciembre el Gobierno alemán ordenó un "amplio paquete de piezas de repuesto". Además, Berlín tiene previsto crear las condiciones necesarias para que los tanques se reparen en Ucrania en vez de ser transportados a Lituania.
En marzo de 2023, el Gobierno alemán transfirió a Ucrania un total de 18 tanques Leopard 2, cuatro más que los ofrecidos dos meses antes. Berlín había prometido inicialmente 14 unidades del tipo Leopard 2A6, pero aumentó la cifra a 18 tras quedar claro que la oferta inicial no era suficiente para formar un batallón.