"El factor fundamental que determina el aumento de la inestabilidad global y regional es la aspiración de EE.UU. y sus aliados a mantener el orden mundial unipolar y el dominio económico", afirmó este miércoles el jefe de la Armada de Rusia, el almirante Nikolái Yevménov, en una entrevista al periódico ruso Krásnaya Zvezdá.
De acuerdo con el alto militar, para realizar esta tarea, los países occidentales "usan activamente métodos de presión política, económica, mediática y bélica, hasta utilizar la fuerza militar violando el derecho internacional".
En este contexto, la situación político-militar global "se caracteriza por la alta tensión y la dinámica, conservando un carácter complicado e inestable". Entre los aspectos que determinan su evolución, Yevménov mencionó la confrontación entre Rusia y Occidente, debido a la crisis ucraniana, y el terrorismo internacional.
Además, entre las amenazas para la seguridad militar de Rusia señaló "la presencia de poderosas agrupaciones de fuerzas navales extranjeras en los océanos Atlántico y Pacífico y el mar Mediterráneo", así como la militarización del Ártico y los planes de Occidente para socavar los intereses rusos en la región, mediante la revisión del estatus de la Ruta Marítima del Norte.
Para enfrentar estos desafíos, el almirante hizo hincapié en la necesidad de tener una Armada moderna que, junto con el resto de las Fuerzas Armadas, sea capaz de "garantizar la disuasión estratégica nuclear y convencional de las agresiones y la protección de los intereses nacionales de la Federación de Rusia en los océanos del mundo".