El escaneo láser permitió a los científicos descubrir vestigios de murallas, pirámides y caminos enterrados en la selva ecuatoriana. Dichos asentamientos existieron al menos hace 2.500 años, unos 1.000 años antes que las civilizaciones amazónicas conocidas, según un comunicado publicado en la revista Science.
El estudio se llevó a cabo desde el 2015 desde una aeronave utilizando un LiDAR, un localizador láser que permite ver el terreno incluso a través de los densos matorrales por los que es famosa la cuenca del Amazonas.
Estos hallazgos amplían la investigación que desde hace más de 30 años se ha llevado a cabo en el valle de Upano en los grandes asentamientos Sangay y Kilamope.
Varios años de investigaciones aportaron un descubrimiento de plazas centrales, complejos de montículos, cerámicas características y hasta vasijas con restos de la tradicional chicha, una bebida fermentada común en países andinos. Y ahora el mapeo por LiDAR ha permitido ver la relación entre Sangay y Kilamope.
"Sabía que teníamos muchos montículos, muchas estructuras", dice Rostain. "Pero no tenía una visión completa de la región", comentó a LiveScience Stéphen Rostain, un arqueólogo de la agencia nacional de investigación de Francia que desde hace varios años lidera los trabajos en el valle de Upano.
Los resultados del mapeo superaron todas las expectativas: cinco asentamientos grandes y diez pequeños que cubren una superficie de 300 km². Y en cada uno de ellos se revelaron múltiples edificios residenciales y ceremoniales, calles y barrios claramente distinguibles.
Además, se determinó que al menos 53 especies de árboles que fueron domesticadas en esta zona.
Similitud con los mayas
Es difícil estimar cuántas personas vivían en estas ciudades. Pero en tamaño, los grandes asentamientos son comparables a las ciudades jardín mayas o a la meseta piramidal de Guiza. Amplias carreteras rectas conectaban las ciudades entre sí, lo que sugiere que existieron simultáneamente. "Un desarrollo temprano tan extenso en el Alto Amazonas se asemeja a sistemas urbanos mayas similares en Centroamérica", reza el comunicado sobre el estudio.
La datación por radiocarbono mostró que los sitios de Upano estuvieron ocupados alrededor del año 500 a. C. hasta entre el 300 y el 600 d. C.
Los resultados de la investigación proponen que los arqueólogos han descubierto ahora una sociedad compleja y organizada que existió en América del Sur hace al menos 25 siglos.