El producto interno bruto (PIB) de Alemania en 2023 fue un 0,3 % menor que el año anterior, mientras que la caída de la producción económica fue del 0,1 %, según los cálculos preliminares de la Oficina Federal de Estadística del país (Destatis) publicados este lunes.
"El desarrollo económico general en Alemania se estancó en 2023 en un entorno que sigue marcado por múltiples crisis", aseguró la directora de Destatis, Ruth Brand, durante una conferencia de prensa donde se hicieron públicos los datos.
De acuerdo con Brand, a pesar de los recientes descensos en los precios, estos se mantuvieron elevados en todos los niveles de la actividad productiva, lo que "frenó la economía" alemana. A esto se sumaron las condiciones de financiación desfavorables, con altos tipos de interés y una menor demanda del extranjero, explicó.
Sin embargo, el país europeo evitó caer en una recesión técnica, que se produce cuando se registran dos trimestres consecutivos de crecimiento negativo, escribe Reuters.
Los resultados económicos de la industria, excluida la construcción, disminuyeron un 2,0 % en 2023, debido a una producción mucho menor en el sector del suministro energético, mientras que la actividad económica de los servicios contribuyó al crecimiento.
Por su parte, la construcción registró un modesto crecimiento del 0,2 % en 2023. El deterioro de las condiciones de financiación tuvo un impacto especialmente notable en el sector, junto con la persistencia de unos costes de construcción elevados y la escasez de mano de obra cualificada.
El moderado ritmo de crecimiento de la economía mundial y la debilidad de la demanda interna en 2023 también afectaron al comercio exterior, que disminuyó a pesar de la caída de los precios, con una contracción de las importaciones del 3,0 % y una caída de las exportaciones del 1,8 % en ese año. Esto se reflejó en una balanza comercial neta positiva, que favoreció al PIB.