El acuerdo de cooperación en seguridad firmado la semana pasada entre Kiev y Londres demuestra que no permitirán a Ucrania negociar la salida del conflicto, afirmó este miércoles en rueda de prensa la portavoz del Ministerio de Asuntos Exteriores de Rusia, María Zajárova.
"Los dirigentes británicos están haciendo todo lo posible para evitar que los aliados de la OTAN pierdan interés por lo que ocurre en Ucrania, que Londres sigue considerando como una herramienta geopolítica dirigida contra Rusia", declaró.
Según la vocera, el acuerdo demuestra que a Kiev "no le dejan literalmente ninguna posibilidad de salir del conflicto mediante negociaciones, convirtiéndolo en moneda de cambio en las aventuras anglosajonas y manteniéndolo en el actual rumbo de confrontación euroatlántica y antirrusa".
Zajárova destacó que el acuerdo obliga a Ucrania responder en 24 horas a un ataque contra el Reino Unido y a defenderlo. "Ninguna persona normal puede creerlo, dado que el régimen del [presidente ucraniano Vladímir] Zelenski grita a cada paso que si no se le transfiere un dólar, un euro o una libra más, no quedará nada de Ucrania", señaló.
"A los ucranianos simplemente se les entregó un conjunto de brillantes promesas de ayuda, principalmente de asesoramiento y consejo, enmarcadas en bellas garantías de apoyo a Ucrania, que no tienen ninguna fuerza legal vinculante", concluyó.
El Acuerdo de Cooperación en Seguridad entre el Reino Unido y Ucrania estipula que Londres y Kiev decidieron "profundizar su cooperación". Los principales componentes de los compromisos de seguridad asumidos por el Reino Unido incluyen:
- prestar asistencia a Ucrania para "proteger y restaurar su integridad territorial dentro de las fronteras reconocidas internacionalmente"
- prevenir y contrarrestar cualquier escalada militar
- apoyar la futura integración de Ucrania en las instituciones euroatlánticas.
El acuerdo describe también medidas que deben adoptarse si se produce algún ataque armado contra el territorio ucraniano, pero no menciona la posibilidad de una participación directa del Reino Unido en el conflicto ni el despliegue de sus tropas en territorio ucraniano. Así, indica que en caso de un ataque armado de Rusia, las dos partes celebrarán consultas en las primeras 24 horas "para determinar medidas necesarias para contrarrestar o disuadir la agresión". En esas condiciones, el Reino Unido promete proporcionar asistencia de seguridad y equipo militar, imponer sanciones contra Rusia y consultar a Ucrania sobre sus necesidades.
"De repente necesitan poner sus manos en estas minas"
Asimismo, la alta diplomática indicó que la empresa European Lithium Limited, propiedad de un empresario británico, compró una compañía ucraniana de litio con una licencia para explotar un yacimiento ubicado en territorio de la República Popular de Donetsk.
"Curiosamente, en el verano de 2023, la misma European Lithium Limited lo rechazó [este yacimiento] por […] la proximidad al frente. Hoy, los inversores británicos de repente necesitan poner sus manos en estas minas", aseveró, agregando que "todo lo que se da ahora al régimen de Kiev, [...] se da a crédito bajo la obligación de compensarlo todo".
"Nunca ha habido un momento en la historia en el que los anglosajones, habiendo dado algo a alguien, no hubieran exigido que se les devolviera, y más aún con dinero extra. ¿Con qué pagará Ucrania y el pueblo ucraniano todo esto? Está claro con qué: con tierra, subsuelo", subrayó.
Además, la portavoz de la Cancillería rusa resaltó que, según los pronósticos, Ucrania podría incurrir en impago en el año 2024 debido a su creciente deuda pública.
El especialista en inteligencia y procesos de seguridad Ramón Celaya opina que no hay control de las armas y municiones destinadas a Ucrania, por lo que terminan siendo comercializadas en el mercado negro tanto de Europa como del continente americano.